Cumplir 15 años significa cambio. Y, precisamente, la banda Cultura Profética ha experimentado grandes giros en su carrera artística que le han permitido fortalecer su relación con el público puertorriqueño e internacional.

Como los motivos para celebrar sobraban, la agrupación boricua quiso  festejar su quinceañero de una manera singular. Para empezar, el grupo cambió su tradicional casa, el anfiteatro Tito Puente, por el estadio Sixto Escobar, en San Juan, para recibir en una sola noche a un gran número de seguidores que colmaron el área de la grama. 

En los platos de su tradicional menú musical, también hubo variaciones, como la interpretación de un sublime segmento con los temas La espera, Días intensos y Árboles, acompañados sólo con las guitarras; la realización de interesantes arreglos musicales, como en Rimas pa’ seducir; y la integración de canciones que no suelen añadir en su repertorio, como Lo de más, de la autoría de Silvio Rodríguez. Los músicos, además, tuvieron la visita de invitados especiales: el trovador Luis Daniel Colón, y el ex tecladista del grupo Bayrex Jiménez, quien se unió en Nadie de atreve.

Pero como la esencia de la banda está intacta, el espectáculo sirvió además para denunciar su posición en contra de la construcción del Gasoducto, rechazar la cuota de $600 que se les quiere imponer a los estudiantes de la Escuela Secundaria de la Universidad de Puerto Rico, en la que estudiaron algunos miembros, y criticar las gestiones de gobernador Luis Fortuño y el alcalde de San Juan, Jorge Santini.

Los integrantes Willy Rodríguez (cantante y bajo), Eliut González (guitarra), Boris Bilbraut (batería), Omar Silva (guitarra) y Juan Carlos Sulsona (teclado) subieron a la tarima el sábado, a las 10:30 de la noche, después de un breve recorrido fotográfico por instantes de su carrera, que se proyectó a través de una pantalla en el centro del escenario.

Baja la tensión, de su último disco La dulzura, marcó el inicio del concierto de tres horas de duración. Después de las interpretaciones de Sube el humo, Somos muchos, y Rimas pa’ seducir –una de las más coreadas por el público de distintas generaciones–, Willy agradeció a sus seguidores que se dieran cita a esta celebración.

“Para mí, es una sorpresa que se haya llenado porque Cultura no es una banda, sino un movimiento. Cultura somos todos juntos”, fueron las palabras de bienvenida del vocalista, quien junto con Boris, interpretó canciones de sus cinco discos.

La voz principal del grupo señaló el exceso de protagonismo de los líderes políticos, en referencia a la Convención del Partido Nuevo Progresista en un hotel aledaño al estadio. 
Reveló también que la promoción del concierto fue estropeada por fanáticos políticos. “Eso es un ejemplo de las cosas que se viven en este país, donde unos se imponen a otros, y así nos meten el gasoducto y te aumentan la luz como si fuera justo, con tantas alternativas”, comentó Willy a la vez que compartió con el público una anécdota sobre su emoción al escuchar a la nacionalista Isabel “Isabelita” Rosado Morales, a sus 104 años de edad, defender la libertad y la independencia de su patria.

“Por ella y por los que han luchado y han estado en prisión en busca de la libertad soñada”, dijo el cantante antes de dedicarles a los presos políticos el tema Canto en la prisión, cuya letra es un poema Elizam Escobar.

Después de cantar La complicidad, Willy hizo otra pausa para comentarles a los asistentes que los músicos realizaron una celebración similar en el Luna Park, en Buenos Aires, que consideraron “impensable” hasta la noche del sábado. “Ustedes nos han volado la cabeza. Y nos dan razones para pensar que se puede convocar a tanta gente para asuntos importantes (del país) y que vale la pena caminar por ellos y unificarnos”, expresó como preámbulo al tema ¿Qué será?, que hace referencia a “los tiempos que se viven”, como “las elecciones en las que ustedes son los que eligen, así que vamos a ponernos para lo nuestro”.

Uno de los momentos que el público disfrutó fue cuando el músico Orlando Laureano subió a la tarima con su tiple para acompañar al trovador Luis Daniel Colón, quien llegó junto con los niños Migdalis Torres y José Jared. En su improvisación, Colón hizo referencia al compromiso de la banda con su país, uno de los motivos para festejar su permanencia en el ambiente artístico.

Otros temas que interpretaron fueron Revolución en estéreo, Verso terso, En la oscuridad, No me interesa, Ilegal, Amante luz, Deseo y Fruto de la tierra.

El acto de apertura estuvo a cargo de la cantautora Mima, quien interpretó canciones de su disco El pozo.  DJ Velcro también preparó el camino para la parte cumbre del festejo: la potente actuación de Cultura Profética.