La banda puertorriqueña Calle 13 cumplió su cita con su pueblo con un espectáculo en el que demostró que la ausencia de tres años en San Juan redundó en madurez musical, crecimiento en sus composiciones y en que mantienen intacto su compromiso social.

Los líderes del grupo, René Pérez (Residente), Eduardo Cabra (Visitante) e Ileana Cabra (PG-13) habían anticipado un concierto diseñado para Puerto Rico, distinto a los demás de la gira “Entren los que quieran”,  y con grandes valores de producción.  Y lo cumplieron.

Los artistas sobrepasaron las expectativas al nutrir su concierto con invitados como el cantautor panameño Rubén Blades y los intérpretes boricuas Tego Calderón y Lucecita Benítez. Pero, también, como parte de su compromiso en darles voz a los menos escuchados, Residente invitó a la tarima al niño Jay Liván Díaz del Valle, de la barriada Morales de Caguas, y al joven Carlos Muñiz Pérez, quien nuevamente le exigió al FBI el esclarecimiento del asesinato de su padre, el cubano Carlos Muñiz Varela.

Y, como “quien ríe último, ríe mejor”, hubo espacio para el desquite contra el alcalde saliente Jorge Santini, quien, según los artistas han expresado, les puso obstáculos en el camino para presentarse en la ciudad capital e incluso tomó represalias con quienes se aliaban de manera artística o comercial. Esta descarga fue totalmente aprobada por el público, de todas las edades, que gritaba “periquero” al referirse al funcionario. 

El espacio al aire libre del Isla Grande Pier en San Juan contó, además, con un complejo montaje de una tarima alta que permitía que desde lejos pudiera ser apreciada por los 25 mil seguidores que llegaron hasta el lugar, además de que sus cinco pantallas lograron que los temas se enriquecieran con imágenes.

El sábado, la impresionante multitud comenzó a llegar al lugar desde las 5:00 de la tarde al área.  Niños, adultos, personas mayores, personas en andadores y sillas de ruedas colmaron esta explanada contigua al Centro de Convenciones. Fueron miles los que se “portaron mal”, excepto el cielo, pues a pesar de los días previos, no llovió durante el show.

Pero no fue hasta que el reloj marcó las 10:25 que la banda subió a la tarima para alborotar a la “tribu salvaje” que brincó, gritó y bailó en el espectáculo de alrededor de dos horas.

Desde el inicio, Calle 13 dejó claro, a través de visuales que aludían a distintas manifestaciones, que simboliza una voz de resistencia en contra de las injusticias y los atropellos de los líderes políticos y, sobre todo, a favor de las luchas estudiantes y civiles.

El concierto permitió que Calle 13 mostrara distintos lados: el de denuncia con temas como “La bala”, “Pal norte” y “El hormiguero”,  el entretenido con canciones como “La cumbia de los aburridos” y “Fiesta de locos”, y el romántico con “Un beso de desayuno” y “La jirafa”. Se evidenció cuán conectados están los músicos con la propuesta de la banda, en la que es esencial la presencia de PG-13 con su voz y energía en escena.

Residente, quien finalmente pudo pronunciar “Puerto Rico en la casa”, habló sobre quienes lo critican sin “bases” antes de que entrara una “llamada” del ex alcalde Santini. La gente escuchó una entrevista entre el personaje de “La Comay” y Santini, en la que tildaban a René Pérez, entre otras cosas, de “charlatán”. Mientras, en la pantalla del centro se mostraba a un aturdido Santini y las imágenes de un cerdo. El momento resultó en una gritería de la gente con frases como “Santini, periquero” y “Santini fuera de Puerto Rico”. Este fue el preámbulo al tema “Digo lo que pienso” en compañía del nicaragüense DJ Craze. 

Residente instó a los líderes políticos presentes en el show a priorizar la educación del país, que, entre otros factores, redundaría en menos violencia. Se solidarizó con los familiares de la recién masacre en Connecticut y con quienes han perdido a seres queridos  que “no han muerto en vano”. Invitó, entonces, al joven Carlos Muñiz Pérez, quien leyó una carta al FBI en la que exige los nombres de los asesinos de su padre, Carlos Muñiz Varela.

El primer invitado de la noche fue el cantautor panameño Rubén Blades, quien acompañó a los artistas en el tema “La Perla”, ante un público incrédulo y sonriente, que minutos más tarde se alegró con el junte de Tego Calderón. La colaboración del exponente de hip hop en el tema “Sin exagerar” fue la más acertada de la noche por la química con los artistas y por la respuesta del público.

Otro de los momentos de reflexión sobre la situación del país se produjo con la presencia de Jay Liván Díaz del Valle, de 13 años, de la barriada Morales, del mismo lugar donde son los imputados de asesinar al publicista José Enrique Gómez. “Soy de un lugar excluido y de donde muchos queremos echar pa’alante pa’ que no digan que somos unos queda’os”, dijo el adolescente al enumerar las actividades educativas y artísticas que se realizan en la comunidad.

A preguntas de Residente sobre qué le gustaría que los líderes dejaran de hacer con el pueblo, el elocuente joven comentó “que no sigan truqueando con los chavos de nosotros” y “que hagan propuestas de trabajo”.  “Un saludo a todos los barrios y residenciales que nos vamo’ a to’as por una mejor sociedad”, culminó Jay Liván provocando fuertes aplausos.

La última invitada fue la cantante Lucecita Benítez, quien deslució en escena al estar perdida y fuera de tiempo, como si no hubiera ensayado el tema “Latinoamérica”, uno de los más emblemáticos de la banda. La intérprete intentó improvisar en el coro, lo que hizo que se esfumara la emoción del esperado tema. PG-13, sin duda, salvó la canción imponiéndose con su potente voz. Este instante, no obstante, no le restó valor al excelente show en el que los integrantes y el público se entregaron de principio a fin.

Calle 13 dejó establecido que su ausencia no tuvo consecuencias, sino todo lo contrario, que cada día suma más gente a su propuesta artística e inclusiva.

Hicieron su agosto

El comandante Orlando Rivera, jefe del área policiaca de San Juan, confirmó  que se expidió un número mayor de lo normal de boletos por estacionamiento el sábado en el área del Centro de Convenciones, en  Miramar, predio utilizado por algunos de los miles de fanáticos que acudieron al concierto de Calle 13 en el Isla Grande Pier.

“Me comentaron esta mañana (ayer) que se dieron boletos”, dijo Rivera. “El teniente Sierra (a cargo de la zona) me dice que la gente dejó los vehículos obstruyendo el tránsito y se vieron precisados a hacerlo”, dijo el comandante. “Se estimó una cantidad... bastante”, dijo sin emitir el número.

Rivera mencionó que “no es la norma” que se expidan boletos en el área del Centro de Convenciones cuando se dan actividades masivas.

“Se es flexible, pero también hay casos como gente que obstruye las aceras, por ejemplo”, indicó al señalar que el Centro tiene capacidad para 2,500 espacios de estacionamiento.  (Javier Colón Dávila /javier.colon@gfrmedia.com)

Repertorio:

Vamo’ a portarnos mal
No hay nadie como tú
Baile de los pobres
Digo lo que pienso
Ven y critícame
Pal norte
La bala
La cumbia de los aburridos
La Perla
El hormiguero
La vuelta al mundo
Tango del pecado
Sin exagerar
Suave
Muerte en Hawaii
Atrévete te te te
Calma pueblo
Un beso de desayuno / La jirafa
Latinoamérica
Fiesta de locos