¡No respetan a nadie!

La estatua del querido animador puertorriqueño Luis Vigoreaux, ubicada frente a las instalaciones de Wapa, en Guaynabo, fue el más reciente objetivo de los vándalos que pintaron de rosa el micrófono de bronce de la pieza. 

La desafortunada situación, que ocurre precisamente cuando se celebran los 60 años de la llegada de la televisión a Puerto Rico, se dio a conocer hoy en el programa "Lo sé todo", de Wapa.

El monumento, confeccionado en Costa Rica,  fue inaugurado en 2009, en el Boulevard Luis Vigoreaux por el alcalde de Guaynabo, Héctor O'Neill y los familiares del animador y productor. 

“Hacemos esto con mucho entusiasmo e interés, porque Luis Vigoreaux no solamente cruzó barreras en Puerto Rico, sino que también a nivel internacional. Fue una persona muy conocida; fue una persona que dio cátedra de lo que es la sinceridad y de lo que es la animación de televisión con seriedad y mucha responsabilidad”, expresó O’Neill cuando se develó la estatua.