La actriz y productora Roselyn Sánchez aprovechó su participación hoy en una masiva esterilización de mascotas para reiterar su postura en favor de un mejor bienestar para la elefanta Mundi, fuera del zoológico de Mayagüez, e igualmente sostuvo su oposición a la permanencia de la peleas de gallos.

Mientras cientos de personas aguardaban en orden para castrar a sus perros y gatos en el coliseo Rubén Rodríguez en Bayamón, como parte del evento Spayathon apoyado por la Human Society de Estados Unidos, la artista dijo que estudiará la nueva alternativa que se presenta de que la elefante Mundi permanezca en la isla, al cuidado del empresario Georgie Ferrer, propietario de la Western Hay Farm, ubicada en Lajas.

“Tengo que estudiarla bien, porque no sabía. Llegué aquí y me enteré de esa posibilidad. Yo me quedé con que se iba a tratar de sacar del país, que estaba en concreto acuerdo, porque si no se tienen los recursos para vivir aquí como Dios manda, pues que la saquen”, afirmó.

“Independientemente sea el animal símbolo del zoológico, la querendona del zoológico, perfecto, pero eso no es velar por el bienestar de un animal y así están todos los mamíferos, tengo entendido”, agregó sobre la información que ha recibido del estado de los animales en el Zoológico de Mayagüez, no obstante, advirtió que no lo ha visitado.

“No he ido, tengo que ir a verlo, pero si se puede resolver el problema con que se quede en el país, en un mejor terreno, con cuidado 24 horas al día, que la puedan volver a poner saludable, divino. Lo que quiero es el bienestar del animal, donde sea que esté”.

La intérprete, que el próximo 17 de junio será parte del estreno de la serie Grand Hotel por la cadena ABC, asimismo, mantiene su aversión sobre las peleas de gallos, cuya eliminación está propuesta para diciembre de este año, según la Ley Agrícola federal. Reconoció, sin embargo, que la eliminación provocará que convierta en una práctica clandestina.

“Es bien triste y seguramente es lo que va a pasar, como pasó con las peleas de los pitbulls. ´Ah, no lo podemos hacer, pues nos vamos a ir underground´, que es peor todavía, así que es una pena que uno por querer ayudar al país de alguna manera a ser un país más progresista, que sea que vamos a retroceder, porque ahora se va convertir en algo más barbárico todavía. Ojalá que no”, dijo.

Su opinión respecto al tema le ha ganado multiplicidad de reacciones, desde mandarla a callar o decirle que no sabe de lo que habla, y es consciente de que es un tema delicado, pero eso no la hará cambiar de posición.

“Mi familia tienen amistades que son galleros, pero es algo que no lo puedo evitar. No lo soporto, a mí el abuso me da náuseas. Independientemente de que la gente piense que es tradición, que es cultura, que no lo es, no todo lo que es ley es bueno. La esclavitud fue legal en un momento dado. La mujer no votaba, pero hubo cambio en la conciencia... Las leyes se modifican, la gente progresa, los países progresan, son más civilizados. Para mí, lo que es abuso, estoy en contra”.

Sánchez continuará apoyando el Spayathon, que termina mañana. Anticipó que está escribiendo un proyecto, que también dirigirá, y lo realizará en la isla. En el verano regresará al país para vacacionar con su familia.