Raymond Arrieta ahora va de Aguadilla a San Juan
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 15 años.
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Con los pies adoloridos, la piel quemada por el sol y picada por los mosquitos, con las lágrimas mojándole las mejillas... el comediante Raymond Arrieta prometió que volvía a caminar, y desde ayer, lunes, comenzó a cumplir su palabra.
Tras terminar la edición de ayer del programa Día a día de Telemundo, el artista regresó al gimnasio Powerhouse en Guaynabo para volver a poner su cuerpo a merced del entrenador RuyFe.
Sonriente con las muelas de atrás -gesto típico de alguien en su primer día de entrenamiento-, Raymond Arrieta inició la rutina de ejercicios de resistencia y cardiovascular que deberá seguir por no menos de seis días por semana.
Y es que el reto este año es mayor, “no puede ser nada fácil”. Con eso en mente, ya se ve caminando desde Aguadilla hasta San Juan, entre 90 y 95 millas, unas 15 más que las que recorrió en mayo pasado, cuando realizó la 2da Caminante Ramón Rivero “Diplo” desde Ponce hasta San Juan para recaudar dinero para los pacientes de cáncer.
“Por donde vamos a caminar, si es la número 2, pues hay muchas compañías, podemos recolectar más dinero para los pacientes de cáncer, porque La Piquiña (entre Salinas y Cayey) fue bien chévere, pero ahí ya no vive casi gente”, expresó el intérprete de “Wally”.
La fecha exacta de la caminata aún no está determinada, no obstante, el aumento en la cantidad de millas también sumará días al evento.
“Lo que podemos hacer es que caminamos un día o dos días más; hacerlo quizás a 15 millas por día, no tirarnos un maratón como el que hicimos el año pasado que fueron 24 millas en un día... Nosotros llegamos a Telemundo muertos”, detalló quien prevé que este año la actividad movilizará más gente. “Sé que este año va a ser más grande, porque la gente ya sabe de qué se trata”.
Contrario al año pasado, Raymond Arrieta tendrá cerca de cuatro meses para acondicionar su cuerpo, sobre todo, las piernas.
Para ello, el entrenador le diseñó una rutina que, lejos de producir resultados estéticos, es funcional. En principio, se concentrarán en bajar de peso, unas 15 a 20 libras, con ejercicios cardiovasculares, y luego, en fortalecer los músculos de la espalda, para una buena postura, y las piernas, de forma individual, de modo que adquiera una mayor resistencia al dolor, que será inevitable.
“El miedo mío es siempre que me lastime un tobillo, que no pueda terminar”, dijo quien destinará parte del dinero recaudado a los niños y niñas con cáncer bajo el nombre Cabecitas rapadas.
Aparte de ser una ruta distinta, otro elemento novedoso serán las cámaras que planifica colocar el también animador de radio y televisión en el interior del trailer donde pernoctará junto con sus entrenadores RuyFe y Freddie Rodríguez.
Los visuales se podrán apreciar a través de la Internet.
Al momento son muchas las personas que se le acercan, según cuenta, comprometidas a acompañarlo en su nuevo reto, entre ellos Abraham, Piqui Soto, José Carlos, hijo del fenecido José Miguel Agrelot; y a todos les dice lo mismo: “Se te van a parar lo pelos si caminas conmigo, va a cambiar tu vida”.
A él lo cambiaron las decenas de vivencias que recogió en el camino, como “los niños ciegos que me decían: 'Te falta un montón todavía'; una señora que me dijo llorando: 'Mi hija murió de cáncer y a la otra le diagnosticaron cáncer ahora' y me dio dos pesos...”.
Todas estas memorias son las que ahora lo llenan de energía y lo animan a hacerlo de nuevo.
“Si pueden caminar conmigo un pueblito, por cuestión de salud, háganlo”, concluyó.