Rankeao el chamaquito de Las Monjas
Noriel se coloca entre los principales exponentes con su segunda producción “Trap capos”.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 6 años.
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La suya parece una historia sacada de la fantasía. Tanto así, que a veces la nueva sensación de la música urbana, Noriel, siente incredulidad ante el cambio que ha representado en su vida convertirse en una de las figuras más populares del género del trap.
En menos de dos años, el cantante y compositor ha logrado posicionarse entre los favoritos del público que sigue esta expresión musical. Este mes logró el lugar #1 en la plataforma Apple Music con su segunda producción Trap Capos, convirtiéndose en el artista que desplazó a Ozuna de este puesto que mantuvo desde agosto del año pasado.
"No le creía a mi manejador cuando me lo dijo", contó el cantante, cuyo video del sencillo en promoción, “El Problema”, ya superó el millón de visitas en YouTube.
La canción es la única con ritmo de reguetón en el disco y, según confesó el artista, su favorita de toda la producción. Noriel contó que escribió la letra después de grabar a su novia, la modelo y presentadora venezolana Elizabeth Sinai, cuando estaba "peleando sola".
“Yo la grabé y subí el video a Instagram. Ahí empezó todo”, relató.
La explosiva popularidad del trap, opinó Noriel, se debe a que capturó la atención del público que en cierto modo desatendió el reguetón cuando se comercializó y empezó a adoptar reglas que le impiden, por ejemplo, utilizar muchas palabras consideradas soeces o abordar determinados temas.
“Nosotros volvimos a la escencia de lo que era el 'underground'. De contar lo que pasa en la calle. Lo que puede pasarle a una persona común en el día a día, no a todos, pero a algunos”, opinó.
Precisamente, del trap le gusta la libertad que ofrece para decir lo que quiera.
“No tengo reglas. No tengo que dejarme llevar por la emisora", destacó.
A los 14 años Noriel empezó, sin saberlo, a labrar su carrera artística escribiendo canciones a modo de "tiraera" entre los corillos de la escuela. Y al cabo de un tiempo sus temas formaban parte del repertorio de cantantes urbanos que ahora prefiere no mencionar.
Al mismo tiempo cantaba, pero luego se retiró para dedicarse a probar suerte estudiando hojalatería y pintura y técnología radiológica, entre otros oficios en los que no le fue bien.
Retomó el micrófono espontáneamente cuando ningún artista aceptó un tema que escribió. “Nadie lo quiso porque hablaba muy malo”, cuenta entre risas.
Noriel subió el tema a las redes sociales y de una forma sorprendente e inesperada para él, empezó a ganar seguidores. Antes de poder asimilar su nueva realidad como figura pública estaba sentado en un restaurante de comida rápida recibiendo las miradas raras y curiosas de la gente que ahora lo reconocía.
Antes de ser un artista del trap trabajaba en un "valet parking", responsabilidad que dejó para empezar a hacer presentaciones que le dejaban entre $ 6,000 a 8,000 semanales.
“No hubo tiempo a decir: mami, las cosas están mejorando”, dijo con satisfacción.
¿Cómo ha cambiado tu vida últimamente?.
“En todo. Es un cambio bien emocionante llegar a ver que en verdad puedes cumplir tu sueño", destacó. “Pero hay muchas cosas que tienes que dejar de hacer. Ya no puedes ir al cine porque te va a ver to; el mundo, van a tirar fotos. Hay muchas, muchas cosas. Te lo digo por experiencia propia. Hay veces que yo tengo hambre y me meto a un McDonald's y escuchas a los empleados diciendo: acho tantos chavos y comiendo aquí. No puedes hacer cosas normales porque no eres normal".
Poco a poco, el joven de 23 años se está acostumbrando a este nuevo escenario mientras disfruta de las ventajas del éxito y lo que conlleva en términos materiales.
¿Qué es lo más que te gusta de tu nueva vida?
Si te soy honesto, es que nadie en mi familia tiene necesidades. Yo vengo de Las Monjas y teníamos muchas necesidades. Ahora está todo el mundo bien. Eso es lo más que me ha gustado. Poder ver a tu mai' tranquila. Que no tenga que estar jodiéndose trabajando".
Ahora la meta de Noriel es lograr que su segundo disco supere la acogida del primero y piensa que así será.
“No está bien que quede mas 'trili' que el primero. Yo voy a mí. Yo zumbo, olvídate de eso”, apuntó.