En medio de la turbulencia pública que sacudió a Gerard Piqué luego de la publicación de la “Session #53″ con Bizarrap, Shakira lo recibió en su casa. Este fin de semana las cámaras de la prensa internacional captaron el momento en que el catalán se acercó hasta las inmediaciones de la propiedad para dejar a sus hijos, Milan y Sasha, con la cantante. Este acercamiento es el primero luego del hit musical con el que ella le dejó en claro que no hay margen para un regreso.

Este domingo Milan Piqué Mebarak cumplió diez años y Shakira organizó un festejo íntimo. En su hogar de Barcelona, la cantante recibió aproximadamente a 15 compañeros de su hijo. Además contó con la presencia de su familia, en especial la de su hermano Tonino. En esta fecha tan importante el exfutbolista no quiso perderse ni un momento, por lo que dijo presente... pese a todo.

Debido a que los dos pequeños estaban bajo su cuidado, en horas de la tarde Piqué se acercó hasta la casa de Shakira para que Milan celebrara su cumpleaños con amigos. Fue en ese entonces cuando, según Europa Press, la zona se atiborró de fans de la cantante que esperaron al catalán para entonar estrofas de la polémica canción.

Aún así, Piqué mantuvo la calma y le entregó los niños a Tonino en el interior del hogar. Después que se cumplió el objetivo, el hermano de Shakira caminó hasta el grupo de fans y grabó un video con su celular para que la cantante pudiera tener en cuenta el apoyo del público en las afueras de su casa.

Una vez que el catalán se despidió de sus hijos, se dirigió hacia la casa de sus padres, Montserrat Bernabéu y Joan Piqué, que está al lado de la que supo ser su vivienda junto a Shakira. En ese instante, los fans empezaron a cantar una parte de la canción que la colombiana publicó junto a Bizarrap: “Me dejaste de vecina a la suegra/Con la prensa en la puerta y la deuda en Hacienda”. Más tarde, el exjugador reveló al programa Plan de Tarde de La 1 que solo ingresó al garage donde convivía con Shakira pero en ningún momento mantuvo contacto con ella.

La situación más llamativa de la tarde fue cuando la cantante se asomó por una de las ventanas de su casa y saludó a todos los fans que estaban agolpados en la entrada. Lució un estilo particular, una gorra sobre su cabeza y un buzo con el dibujo estampado de su rostro, el mismo que aparece en la “Session #53″. “Las mujeres ya no lloran, las mujeres facturan”, completa el excéntrico diseño que enseñó a sus admiradores. En tanto, les dijo: “Han hecho tanto por mí, muchas gracias”.

No obstante, el gesto de Shakira llamó la atención de sus fieles seguidores y también de la prensa, quienes interpretaron su aparición en el balcón con la singular prenda como un “palito” en dirección a Gerard Piqué.