Familiares y allegados al veterano cantante y compositor puertorriqueño Antonio Cabán Vale “El Topo” han solicitado oraciones para la recuperación del percance de salud que atraviesa, y que no ha sido revelado.

El pasado sábado su hijo Adean Cabán Butter compartió en su cuenta de Facebook una reflexión que despertó que usuarios compartieran sus deseos de mejoría para el autor de Verde Luz y Solina Solina

“Para su honra y su gloria proclamo su grandeza, contigo todo, sin ti nada. Pido oracion por la salud de mi padre. Que Dios lo hunja y sane con su santo manto. Que salga parado sobre sus propios pies para servirle y honrarle”, escribió.

Ayer el cantautor Silverio Pérez también solicitó, a través de su cuenta de Twitter, oraciones para el artista con más de cinco décadas de trayectoria musical.

“Una vibras, oraciones o energías, lo que usted quiera enviar, por la salud de El Topo, son bienvenidas”, compartió.

En mayo del año pasado se dio a conocer el fallecimiento de su esposa, María Luisa “Lumi” Butter Rodríguez, quien murió por complicaciones de la enfermedad de cáncer. Para esa misma fecha, se reveló que el también padre de Guanani -y de Guanina Robles Butter, de una relación anterior de su esposa- estaba atravesando por unos cuidados médicos de salud.

En 2011 el intérprete mocano fue intervendido del corazón por tener unas venas obstruidas.

De acuerdo con la Fundación Nacional para la Cultura Popular, el guitarrista nación el 22 de noviembre de 1942.

Con más de una veintena de grabaciones, en la década de 1990 lanzó producciones como La patria va y Un metro de ternura. En este último, del cual sobresalió el tema Amante corazón, contó con la producción y dirección musical del maestro dominicano Manuel Tejada, así como con la supervisión y selección de repertorio de Juan Luis Guerra.

El cantante también es autor de dos libros de poesía. Con Un lugar fuera del tiempo, en el cual a través del verso y la prosa nos lleva al barrio de la Caraima de Moca con experiencias de su infancia. En Penúltima salida predomina una nota de angustia y de deseo de buscar caminos dentro de la ceguedad y confusión en que vivimos.