Otro actor cubano escala Hollywood

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 15 años.
PUBLICIDAD
Los Ángeles.- La televisión y Hollywood están cambiando, pero a los actores latinos todavía les es difícil conseguir papeles que no estén ligados a su raza o apariencia física, dice el actor cubanoamericano Jordi Vilasuso, quien pronto aparecerá en la conocida serie televisiva All My Children interpretando a un hispano.
Vilasuso, de 29 años, dará vida al cirujano Griffin Castillo en la serie de ABC que se estrenó en 1970 y todavía tiene como actores a Susan Lucci y Ray McDonnell. Ganador de decenas de premios Emmy, el programa gira en torno a la vida de los residentes de la ciudad ficticia de Pine Valley.
El actor de padres cubanos comenzará a aparecer en la serie a partir de noviembre, dando vida a un médico mexicano que llega a Pine Valley junto con una misión humanitaria de Médicos Sin Fronteras.
Vilasuso ganó un Emmy en el 2003 por su papel de Tony Santos en Guiding Light. También ha actuado en CSI: Miami, Numb3rs, 8 Simple Rules y Fashion House.
Su nuevo papel lo llena de orgullo, dijo, pero también le gustaría que en el cine y la televisión hubiese más apertura para que actores hispanos puedan interpretar a personajes no latinos.
“La televisión está cambiando bastante, pero no hay bastantes oportunidades para actores hispanos”, apuntó el miércoles en una entrevista telefónica con la AP. “(Esto) no te hace sentir bien ... pero estoy muy satisfecho con mi trabajo”.
Hollywood no es diferente, puntualizó el actor, quien ha trabajado en filmes como Magic City, La línea, Heights, Ready or Not y Lost City.
“Está habiendo una apertura en Hollywood pero necesitan la ayuda del público, necesitamos abrirnos y hacer papeles de buenos modelos a seguir, que superen las divisiones culturales no sólo entre los hispanos sino en general”, apuntó. “Nadie le está diciendo a (Javier) Bardem: ‘ Tú sólo puedes hacer este tipo de papeles’. Puede ser un poco de las dos cosas”.
¿Qué hacer para no desanimarse?
Trabajas muy duro para convencerlos de que actúas muy bien, para que no te rechacen, para no darles razones para que digan: “Oh, él es hispano”. O quizás sólo tengo que trabajar más duro. Pero ... no puedo cambiar mi físico, no voy a cambiarme el nombre.