Oscar de la Hoya admite que fue adicto a la cocaína, al alcohol y que fue infiel - Vídeo
“Mi vida fue un gran desastre”, confesó De la Hoya.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 14 años.
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El ex boxeador y empresario Oscar de la Hoya aceptó que fue adicto a la cocaína, que fue un alcohólico, que le fue infiel a su esposa en más de una ocasión y que hasta pensó en suicidarse.
En una entrevista con el programa de Aquí y Ahora de Univisión el ex campeón mundial se sinceró y aceptó que los pasados años han sido muy difíciles para él y su familia, en especial su esposa la boricua Millie Corretjer.
“Mi vida fue un gran desastre”, confesó De la Hoya.
“Toque fondo recientemente. Llegué a pensar si mi vida valía la pena, pero no tuve la fuerza o el coraje para suicidarme, pero lo pensé”, agregó el presidente de la empresa promotora de boxeo Golden Boy Promotion.
De la Hoya reconoció que dependió del alcohol y las drogas para poder funcionar en los últimos años. Y que ésta dependencia lo llevó a cometer estupideces.
“Mi droga de predilección era la cocaína y el alcohol. (La cocaína) Eso fue recientemente, hace unos dos años, dos años y medio. Me valía más del alcohol”, confesó el ex campeón mundial en seis categorías diferentes.
Según el ex púgil, usaba y abusaba del alcohol y la cocaína porque al estar bajo sus efectos se sentía seguro, sentía que nadie lo podía alcanzar, y sobre todo, porque se sentía cerca de su madre, quien falleció pocos meses antes de las Olimpiadas de Barcelona en 1992, donde ganó una medalla de oro.
En cuanto a sus problemas de infidelidad. Aceptó haber estado con más de una mujer durante su matrimonio con Millie, madre de dos de sus hijos, pero aclaró que su situación no llegó a la magnitud de la del golfista Tigger Woods. Woods estuvo fuera del escenario deportivo por varios meses tras saberse que le fue infiel a su esposa con una gran cantidad de mujeres, muchas de ellas por paga.
“No me considero un adicto al sexo pero le he sido infiel a mi esposa. No fue como Tigger Woods pero no fui fiel”, dijo De la Hoya, quien dijo que lo hacía por “llenar un vacío, de no sentirse amado”.
El empresario dijo que en estos momentos está trabajando con su matrimonio.
“Ella está mejor. Lo estamos tomando un día a la vez. Estuvimos separados por un tiempo. No quiero decirle a ella que puedo hacerlo mejor, quiero demostrarle que lo puedo hacer”, aseguró mientras aceptaba que la adicción a las drogas y el alcohol es el rival más difícil al que ha enfrentado.
“Quiero una vida limpia para mí. Esta es la pelea más grande mi vida. Puedo poner a todos mis oponentes en un ring y pelear contra ellos, pero este monstruo va a ser la pelea más difícil de mi vida. Estaré preparado”, culminó De la Hoya, quien lleva tres meses limpio.