Durante su más reciente concierto en Nueva York, Luis Miguel tuvo un par de incidentes que no pudo disimular porque ocurrieron en pleno escenario, el cantante de 53 años volvió a la acción después de acompañar a su hija Michelle Salas en su boda religiosa con el empresario venezolano Danilo Díaz.

Aunque todos siguen esperando ver una foto oficial de la presencia del intérprete de “O tú o ninguna”, junto a su hija, hasta el momento la novia no ha compartido tal, sólo imágenes de ella vestida de novia, con su ahora esposo, con su madre Stephanie Salas, con su hermana Camila Velero y del paradisíaco lugar donde se realizó la ceremonia.

Luismi prepara su llegada a México, donde dará su primer show en Monterrey el 14 de noviembre, para después hacer parada el día 20 en la Arena Ciudad de México.

Luis Miguel vive dos momentos incómodos en el escenario

Hasta ahora, Luis Miguel había vivido puros momentos amenos en el escenario desde que comenzó su gira el 3 de agosto en Argentina, aplausos de sus fans, abrazos y besos de niños, sólo un vaso de agua roto, sin embargo, en su más reciente presentación el sonido falló.

En la parte final de una canción, Luis Miguel se molesta cuando el sonido que recibe en el audífono parece subir del volumen normal, tanto que el cantante y su guitarrista se muestran visiblemente molestos y se retiran el audífono; en 2005, el artista pasó por un problema auditivo llamado tinnitus debido a un accidente en su oído por una falla técnica con su audífono.

Pese a la evidente molestia que le causó, Luis Miguel no explota con su personal como ocurrió en el pasado, sin embargo, sus fans se cuestionan si este detalle afectará o no sus próximas presentaciones.

A la par de este detalle, un momento que se está volviendo viral, y que también le ocurrió en pleno show, fue cuando al bailar, Luis Miguel parece sufrir un dolor en la parte alta de una pierna, así quedó constatado en un video, al cual le han sumado un recordado momento del cantante de cuando era niño y actuó en la película “Ya nunca más”, estrenada en 1984, en el que precisamente se queja del dolor en una de sus piernas.