Durante un largo período, Linda Evangelista lidió no solo con los problemas derivados de su diagnóstico de hiperplasia adiposa paradójica, que sufrió a causa de una supuesta mala praxis en un procedimiento estético, sino que también tuvo que batallar contra el cáncer. Quien supo ser uno de los principales rostros de las pasarelas internacionales mantuvo su enfermedad en secreto y ahora comparte el difícil proceso por el que transitó.

No me iba a morir de esto”, dijo recientemente en una entrevista para la revista de The Wall Street Journal, en la que es retratada por el famoso fotógrafo de moda Steven Meisel, con quien publicará un nuevo libro. La supermodelo de 58 años contó que fue diagnosticada dos veces de la enfermedad en el plazo de cinco años y reveló cómo ha sido su lucha desde entonces.

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En 2018, el primer tumor fue detectado en su mamografía anual. “Los márgenes no eran buenos y, por otros factores de salud, sin dudarlo -porque quería dejar todo atrás y no tener que lidiar con esto- opté por una mastectomía bilateral. Quería pensar que iba a estar bien, preparada para la vida. El cáncer de mama no iba a matarme”, aseguró que se dijo a sí misma.

A pesar de ello, en julio de 2022 se sintió un bulto en su pecho y finalmente se confirmaron los temores: el cáncer de mama había regresado. “Cava un hoyo en mi pecho”, indicó a su oncólogo después de su segundo diagnóstico. “No quiero que se vea bonito, quiero que caves, quiero ver un agujero en mi pecho cuando hayas terminado. ¿Me entiendes? No me voy a morir de esto”, afirmó tras la drástica decisión de volver a ser intervenida quirúrgicamente.

Acostumbrada a lidiar con los problemas de salud a causa de las intervenciones que la dejaron “deformada” con bultos en todo su cuerpo, la top model contó que inmediatamente supo cómo debía actuar, sin pensarlo dos veces. “Simplemente, entré en este modo que conozco, el de hacer lo que tienes que hacer y superarlo. Y eso es lo que hice”, expresó.

En sus controles oncológicos periódicos tras el tratamiento, no todo fueron buenas noticias. Los médicos le confirmaron que su pronóstico era “bueno”, una etiqueta que no convenció a Evangelista, por lo que preguntó a los especialistas: “¿Por qué no es fantástico?”.

“Bueno, una vez que el cáncer regresa, existe la posibilidad...”, manifestó Linda sobre lo que le dijo el médico. La exmodelo también detalló que recibió una “puntuación oncológica horrible”, un número que representa el riesgo de recurrencia de la enfermedad.

Ante un futuro incierto en relación con su salud, Evangelista opta por dar las gracias día a día. “Sé que tengo un pie en la tumba, pero estoy totalmente en modo de celebración. He pasado por problemas de salud horribles y estoy muy feliz celebrando mi libro [Linda Evangelista fotografiada por Steven Meisel], celebrando mi vida. Estoy muy feliz de estar viva y todo lo que venga ahora es una bonificación”, concluyó.

Por su batalla abierta contra el cáncer, la modelo se considera a sí misma “una superviviente en espera”, aunque no pierde el optimismo. Además, explicó que decidió mantener su enfermedad en secreto durante un tiempo para poder atravesar mejor la situación. “Sólo un puñado de personas lo sabía, no soy una de las que necesitan compartirlo todo. Yo pensaba: ‘Compartiré esto algún día´, pero mientras estaba pasando por ello, absolutamente no”, indicó.

Linda ha superado algunos momentos muy oscuros, por lo que poder mirar su carrera y todo lo que ha logrado es algo que quiere celebrar”, mencionó una amiga de la modelo a la revista People.

Las ganancias que obtenga de la venta de su libro con Meisel, que se publicará el 13 de septiembre, serán destinadas a la investigación del cáncer de mama. La publicación se compone de unas 200 fotografías de Evangelista tomadas por el fotógrafo durante casi tres décadas.