Kendall Jenner, criticada pero muy envidiada
La modelo, que mañana cumple 21 años, ha estado en boca de todos, tanto por su vida profesional como personal.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 8 años.
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En los últimos meses, la mayor de las Jenner, Kendall, ha dado mucho de qué hablar, por ejemplo, por su nuevo tatuaje en un lugar poco usual: en el interior de la parte inferior del labio la palabra 'meow' (miau, maullido).
También a principios de octubre, se supo que estaba enfrentada con su mejor amiga Gigi Hadid y todo por culpa de los novios de ambas: Zayn Malik y Harry Styles.
El enojo se debió a un gesto que no sentó del todo bien a Jenner después de que Hadid menospreció de cierta manera la última portada protagonizada por Styles para la revista Another Man. Después de que Harry subió la imagen de la revista a Instagram, Gigi publicó en Snapchat la portada que protagoniza su novio en Elle considerándola mucho mejor que la de su excompañero de One Direction.
Kendall, que mañana cumple 21 años, y que seguramente será a lo grande, como suele hacerlo su familia, también ha estado en boca de todos por pasearse en plena calle sin ropa interior, algo que muchos consideran común en las modelos. Se dice que Kendall se sumó a la compaña #Freethenipple. La verdad, es que Jenner, hermana de Kim Kardashian, nunca se ha caracterizado por ser reservada.
Otra de las situaciones por las que ha dado de qué hablar fue su trabajo para Vogue en septiembre, no solo protagonizó la portada del número de la revista Vogue en Estados Unidos, sino para todas las ediciones en todo el planeta.
Pero el problema no fue precisamente ese, sino que una de las sesiones de fotos que no terminó de convencer a todo el público, fue para Vogue España, en las que la modelo aparece vestida de bailarina de ballet, rodeada de espejos, barras, tutús, zapatillas... Sesión con la que muchas bailarinas, que llevan toda su vida dedicándose al ballet, se sintieron ofendidas asegurando que ella no debía protagonizar esa sesión, sino que debería hacerlo una bailarina real.
Lo cierto, es que a pesar de todos estos momentos la carrera de Kendall va como la espuma, en completo ascenso. Y tal parece que ella no piensa detenerse.