Los Ángeles. El actor y director de “It Ends With Us”, Justin Baldoni, demandó a su compañera de reparto Blake Lively y a su esposo, el actor de Deadpool Ryan Reynolds, por difamación el jueves, en el último capítulo de una amarga batalla legal relacionada con el drama romántico oscuro.

La demanda de Baldoni busca al menos $400 millones en daños, que incluyen ingresos futuros perdidos. La demanda de Baldoni y la productora Wayfarer Studios, que también nombra a la publicista Leslie Sloane como demandada, llega unas dos semanas después de que Lively demandara a Baldoni y a varias otras personas relacionadas con la película, alegando acoso y una campaña coordinada para atacar su reputación por haber hablado sobre su trato en el set.

Esa demanda se presentó el mismo día que Baldoni demandó al New York Times por difamación, alegando que el periódico trabajó con Lively para difamarlo.

La nueva demanda, presentada en un tribunal federal en Nueva York, afirma que los demandantes no querían presentar la demanda, pero que Lively “inequívocamente los dejó sin opción, no solo para aclarar la verdad en respuesta a las acusaciones de Lively, sino también para poner el foco en las partes de Hollywood que han dedicado sus carreras a ser la antítesis de eso”.

Un correo electrónico buscando comentarios de Sloane, cuya empresa de relaciones públicas representa tanto a Lively como a Reynolds, no fue respondido de inmediato.

Ambos actores están representados por la agencia WME, que dejó de representar a Baldoni como cliente después de que Lively presentara una queja legal que fue precursora de su demanda y el New York Times publicara su historia sobre la disputa en torno a la película.

La película, un éxito inesperado basada en la novela de Colleen Hoover, ha causado gran revuelo en Hollywood y ha generado conversaciones sobre el trato a las actrices tanto en los sets como en los medios.