Rígido, enojado e incómodo.

Así se proyectó ayer el astronauta puertorriqueño Joseph Acabá cuando fue abordado sobre  su relación con la meteoróloga Deborah Martorell mientras salía de la Universidad Politécnica, donde participó de la inauguración del  nuevo laboratorio aeroespacial de esa institución académica.

“Yo no tengo nada nuevo que decir. Todos saben que soy buen amigo de Deborah”, expresó tajantemente el astronauta a Primera Hora.

Evidentemente molesto, Acabá aceleró su paso cuando este diario lo abordó sobre el tema mientras era custodiado por personal de la universidad.

La pareja insiste que mantiene una amistad, aunque se asegura que su relación trasciende ese nivel.

Este pasado miércoles, al ser abordada por Primera Hora, la meteoróloga sólo se limitó a decir sobre Acabá que “es un gran amigo al que aprecio muchísimo, que siempre me ha apoyado y le agradezco esa amistad”. 

Deborah Martorell y Joseph Acabá se conocieron en el 2008 en el Centro Espacial Lyndon B. Johnson en Houston Texas. En ese momento el astronauta entrenaba para su misión en el Discovery en marzo de 2009. La periodista recibió, en aquel momento, un permiso de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) de Estados Unidos para visitar al astronauta.