La cantante urbana Zuania Vélez cumplió ayer uno de sus sueños al poder llevar su música en una de las tarimas que albergan las instalaciones del Centro de Bellas Artes (CBA) Luis A. Ferré en Santurce.

Pero lejos de ser un concierto, como ella misma lo promovió en sus redes sociales, el “espectáculo” de la vocalista, mejor conocida como Indy Flow, fue más bien una fiestecita de cumpleaños en la que como homenajeada al fin se dio licencia para hacer lo que le dio la gana. 

La exnovia del cantante Jovani Vázquez presentó ante unas 50 personas los temas completos de algunos de los estribillos que había popularizado a través de las redes sociales, tales como “Bebecito (Robertito) no quiero na’ contigo”, “Mucho cash”, y “Lengua deíto”.

El lenguaje soez y obsceno resaltó en las interpretaciones que formaron parte del limitado repertorio de su “Indy Flow: My Happy Birthday Indiscreta the Live Show”, que se celebró en el café teatro Punto Fijo, cuya administración es independiente del CBA.

“Cuando yo comencé mi carrera, lo acepto, comencé como que cantando coritos, cosas loquitas, pero gracias a Dios (tengo) una nueva vida, una nueva imagen, estoy superenfocada. (Estoy) lista para progresar representando la música en toda la Isla y fuera de Puerto Rico, ¿saben por qué? porque Indy Flow es la diosa del género urbano. Con mucho gusto, haciendo música tanto para mi gente de la calle como para mi gente mundial”, manifestó la reguetonera de 22 años antes de entonar los que llamó sus “éxitos”.

Su actuación, que contó con jóvenes talentos del género urbano, se dividió en tres intervenciones, en las que lució cuatro cambios de ropa durante la escasa hora y 15 minutos que duró el show, donde también presentó su nuevo tema “Indiscreta”.

El uso de playback en sus interpretaciones fue evidente.

Además de declararse una representante de Puerto Rico que “llevo mi bandera a todas partes del mundo”, Indy Flow dejó claro que muy poco le importan las críticas a su peculiar propuesta artística y se burló de quienes la envidian.

“Muchos no han logrado en toda su vida lo que yo logré en solo dos meses”, afirmó poco antes de aparecer en tarima con un corto vestido negro e imponente collar en cristales tornasol. Igualmente, aclaró que su música no la define como persona.

El evento, no apto para un público menor por su alto contenido de referencias sexuales, fue pobre en términos de producción al ofrecer un sonido de baja calidad y carecer de elementos estéticos, como un sistema de luces.

Detalles como el uso de tres tipos de micrófonos, entre ellos uno de cable, le restaron profesionalismo a la producción, al igual que la ausencia de un bizcocho de cumpleaños en una actividad se vendió como la conmemoración del nacimiento de la artista.

Por otro lado, el show, que congregó a un público mayormente compuesto por grupos de hombres y grupos de féminas, comenzó con hora y media de retraso.

Este medio supo que la demora tuvo que ver con el protocolo de seguridad acordado entre la producción y la administración del café teatro, que establecía el registro de los asistentes y que a la hora pautada para el comienzo de la actividad no se había puesto en vigor por la ausencia de un detector de metales.

Del mismo modo, una fuente aseguró que como parte de las negociaciones para celebrar el show allí, se requirió la presencia de al menos dos guardias de seguridad armados y encubiertos, lo cual no es la norma en Punto Fijo.

El evento culminó al son de batucada y con la vocalista, ataviada en vestido largo de encaje en tono coral, saludando al público en el área de la tarima.