Tras cinco años de levantar su voz para apoyar a las sobrevivientes de los abusos de R. Kelly, la hija del cantante, Buku Abi, reveló que ella también fue víctima de su padre cuando era niña.

“Tenía demasiado miedo para contárselo a alguien. Tenía demasiado miedo para contárselo a mi madre”, resaltó.

Las alegaciones de Abi surgen del nuevo documental “R. Kelly’s Karma: A Daughter’s Journey en la plataforma de “streaming” TVEI, donde resaltó que los incidentes se produjeron cuando ella tenía entre ocho y nueves años.

“Él fue mi todo. Por mucho tiempo, yo no quería ni creer que eso sucedió”, dijo ella en el primer episodio de la serie de dos partes, asegurando que “ni sabía que él era una persona mala, que él me hiciera eso a mí”.

En el segundo episodio, Abi aseguró que ella “despertaba cuando me tocaba” mientras pretendía quedarse dormida, y que ella dio a conocer sobre los hechos a su mamá en el año 2009, cuando tenía 10 años.

“Realmente siento que ese milisegundo cambió toda mi vida y cambió quién era yo como persona y cambió la chispa que tenía y la luz que solía llevar”, manifestó en el documental. “Después de decírselo a mi madre, dejé de ir allí; mi hermano [Robert] y mi hermana [Jaah] dejaron de ir allí. E incluso, hasta ahora, sufro mucho con eso”.

La abogada de Kelly, Jennifer Bonjean, negó “vehementemente” las más recientes acusaciones en una declaración a la revista People, diciendo que los cineastas nunca se pusieron en contacto con Kelly para “negar estas afirmaciones hirientes”.

“Su ex-esposa hizo la misma acusación hace años, y fue investigada por el Departamento de Servicios Infantiles y Familiares de Illinois y fue infundada”, expresó la licenciada.

En 2022, un jurado federal condenó al intérprete de “I Believe I Can Fly” por seis de los 13 cargos que se le imputaron, incluidos tres cargos por producir pornografía infantil y otros tres por incitar a menores a actividades sexuales ilegales.

Este afronta una sentencia de 30 años de prisión por tráfico sexual de menores, y luego se le prorrogó la sentencia por cargos federales de pornografía infantil.