Luego de anunciar su regreso a Puerto Rico para celebrar sus 60 años de carrera, la cantante cubarriqueña Flor D’Loto revivió las carencias que vivió con sus padres en Cuba.

“Mi niñez fue muy dura. Mis padres eran pobres, no así mis abuelos maternos que tenían mucho dinero. Ellos se oponían a que mi madre se casara con mi padre porque le faltaba una pierna. Cuestionaban cómo un hombre mutilado podría trabajar y mantener a su hija, pero el amor que se tenían mis padres fue más grande”, narró.

“Una noche mi madre soñó con unos números de la lotería y se los dictó a mi padre. Él los jugó y se ganaron $10 mil, que para aquel entonces eran como $50 mil ahora. Con ese dinero pudieron realizar su boda y se casaron. Ahí uno se da cuenta que cuando se desea intensamente algo en la vida, de alguna manera Dios te bendice y te lo concede”, manifestó la intérprete.

Desde la sala de su apartamento en la Calle Ocho de Miami, donde recibió a Primera Hora, Flor reveló que comenzó su carrera en la televisión a los 8 años de edad, donde fue reina de belleza.

“Desde muy pequeña tenía el arte en las venas heredado de mi padre, que era declamador, y mi madre poetisa. Fui reina de belleza de la televisión cubana, no por un día, fui coronada y todo, vinieron los cadetes de la Academia del Mariel. Me seleccionó Rosita Fornés, una figura emblemática e icono de nuestra historia. Ella y su esposo Armando Bianchi eran pilares de la televisión. Para mí fue un ‘trip’, me sentí reina de realeza, fue una experiencia divina. Todo el mundo me empezó a conocer, comencé a trabajar en el canal 4 de La Habana ganando $150 mensuales”, recordó.

La veterana vocalista, quien salió de Cuba a los 17 años, vive agradecida del pueblo puertorriqueño por la acogida que le dieron.

“Agradezco al Señor por el privilegio de ser querida y aplaudida en muchos escenarios, sobre todo en Puerto Rico, un país precioso donde me hicieron hija adoptiva. Salí de una isla y llegué a otra. Cuando fui al Viejo San Juan me quedé anonadada porque era exacto a La Habana, con todos sus balcones. Me anclé allá, fue mi segundo hogar, donde me desarrollé en las telenovelas”, sostuvo la guapa artista de ojos verdes, antes de recordar la primera novela donde trabajó en la Isla.

“Debuté en la novela ‘Ariana’, protagonizada por Arnaldo Andrés y Gladys Rodríguez. Mi personaje era ‘Tamara’, una domadora de animales. Siempre que salía llevaba conmigo un animalito, hasta que me tocó hacer una escena con una leona, frente ella abofetee a un compañero actor venezolano que hacía el papel de ‘Jairo’. Nos llevamos tremendo susto porque la leona se alteró; abrió la boca e hizo un estruendoso rugido. Todo el mundo se fue corriendo menos yo, que me quedé hipnotizada del miedo. El dueño del circo tuvo que venir a inyectarle un tranquilizante al animal. Cada vez que recuerdo esa anécdota me da mucha risa”, sostuvo.

La veterana artista también se destacó en el mundo de la canción y grabó temas de reconocidos compositores.

“A Davilita le grabé un disco, producido por Paquito Cordero, y otro a Masso Rivera de corte folclórico que titulé ‘Café’. En Puerto Rico me he sentido como en mi casa, me han reconocido todo el tiempo. En el Senado, por iniciativa del expresidente Antonio Fas Alzamora, se me rindió homenaje por el que fui reconocida por mi trayectoria artística”, rememoró.

“Es mucho el agradecimiento que tengo del público puertorriqueño, por eso muy pronto iré a presentarme en concierto y celebrar con ellos mis 60 años de carrera, que había pautado el año pasado y por problemas de salud y el fallecimiento de mi única hermana y su hija, mi sobrina, no pude realizar”, finalizó.