Fallece Awilda Carbia y se lleva su alegría a la eternidad

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 16 años.
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Lo que más le gustaba a la actriz Awilda Carbia era reír. El pasado sábado, eso fue lo que hizo rodeada de sus hijos, José, Myraida y Eduardo Chaves, así como de sus amistades. Esa sonrisa fue el regalo de despedida que les dejó no sólo a sus allegados, sino al pueblo puertorriqueño.
La “Dama de la Comedia” falleció ayer, domingo, a las 4:00 de la tarde, en el Ashford Presbyterian Community Hospital en Condado, a causa de un fallo respiratorio, provocado por una pulmonía. Tenía 71 años de edad. La artista llevaba una semana hospitalizada, pues se encontraba débil y deshidratada, luego de un segundo reemplazo de cadera.
“Aunque se estaba recuperando favorablemente, ese proceso para una mujer muy activa no es tan ágil. Era una mujer que le gustaba hacer cosas y eso la estaba teniendo lenta. No se estaba alimentando bien y lo que hicimos fue hospitalizarla esta semana. Estaba deshidratada, el cuadro se complicó con problemas respiratorios, pulmonía, y señores, que le tocaba”, informó Edgardo Huertas, portavoz de la familia, en una conferencia de prensa celebrada anoche en el hospital en la que también estuvo Otilio Warrington “Bizcocho”. Los hijos de la artista no estuvieron.
El productor manifestó que la actriz murió en paz y tranquila, rodeada de sus hijos. Además, expresó que el sábado sus compañeros estuvieron con ella en el hospital, entre ellos Juan Manuel Lebrón, Rosita Velázquez, Eddie Miró y Chucho Avellanet, entre otros.
“Ayer (sábado) tuvo un día maravilloso, se lo podemos asegurar. Toda la gente que la quería mucho estuvo aquí haciéndole chistes, ella se sonreía, nos miraba... Se le cantó y todavía a las 9:00 de la noche estaban Chucho y Eddie Miró haciéndole chistes. Awilda fue una persona que como quiere que se le recuerde es como una mujer cuyo único oficio fue sembrar alegría y dar alegría, y creo que así mismo se fue, tranquilita y alegre”, dijo Huertas.
Bizcocho, por su parte, describió a Awilda Carbia como su “madre postiza” y destacó que está tranquilo porque sabía que la artista necesitaba descansar.
“Cuando ves a un amigo sufrir, a una mujer que fue tan alegre, a una mujer que siempre tuvo una sonrisa en los labios y era activa, y tú ves que se va apagando, pues uno piensa que los seres humanos también nos cansamos”, manifestó Bizcocho.
Huertas y Bizcocho coincidieron en que Awilda Carbia fue una mujer feliz que hizo todo lo que quiso como actriz y cuya mayor obra, decía, eran sus hijos. Ambos mencionaron que la actriz fue una de las mejores imitadoras en el país y que sus personajes tenían vida propia. Su última presentación fue Las divas de Awilda, celebrada en Mozart Café.
En octubre del año pasado, la actriz lloró de alegría en el homenaje que le rindió el Municipio de San Juan con motivo de la reapertura del teatro Alejandro Tapia y Rivera en el Viejo San Juan.
“Los comediantes usualmente no ríen, lloran, pero ella fue inmensamente feliz”, manifestó Huertas.
El cuerpo de la actriz será cremado y lo único que se celebrará será una misa en su memoria, cuya fecha será anunciada el martes.