El exmerenguero José Medina ya descansa en su hogar, luego de ser sometido ayer, viernes, a una operación para ponerle un marcapasos en el Hospital Auxilio Mutuo.

“Se encuentra adolorido, pero bien. Ya a las 6:00 de la tarde estaba en la casa”, expresó su esposa Deborah, en un mensaje de texto contestado desde el celular del artista.

Agregó, además, que “tendrá que permanecer seis semanas sin mover el brazo izquierdo. Pero conociéndolo, se recuperará antes”.

El intérprete, que popularizó temas como "Señorita", "No es suficiente" y "Cantinero", padece de fibrilación atrial, que en su caso le apaga la electricidad del corazón y deja de bombear,  y síncope vasovagal, que le dilata los vasos sanguíneos y causa un efecto múltiple, porque le baja la presión arterial y el pulso. 

En una entrevista con la agencia INS, José Medina explicó que estando en su empleo -como alguacil en el Tribunal Supremo- el pasado 24 de marzo perdió el balance y se quedó sin habla. 

“Me sucedieron un montón de cosas que no entiendo, porque siempre he sido muy activo. Yo hasta jugaba pelota con Arecibo. En mi familia nadie tiene una condición como esa…”, subrayó Medina.

Antes de que le colocaran el marcapasos, el ahora cantante sacro realizó un concierto como agradecimiento a Dios por tenerlo con vida. 

José Medina abrazó la fe el 31 de diciembre de 1992, al anunciar públicamente su retiro de los escenarios seculares.

Radhamés Nazario, exrepresentante artístico de Medina, ha permanecido muy atento a su salud y planificaba visitarlo hoy, sábado, en su hogar.