Un nuevo capítulo en la disputa entre Britney Spears y su padre se ha abierto, ahora un exagente especial del Negociado Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés) ha revelado que James Spears espió a la Princesa del Pop durante años mientras fungía como su tutor.

Un reciente informe dado a conocer por Page Six detalló que Sherine Ebadi, quien trabajó en casos de fraude y corrupción durante más de una década en la agencia federal, afirmó en una declaración presentada el viernes en Los Ángeles que Jamie “participó e instruyó a otros para que cometieran violaciones inconcebibles (de los derechos y privacidad de Britney) y libertades civiles”.

Ebadi alegó en la presentación que sus hallazgos “plantean implicaciones criminales” para Jamie, quien supervisó los asuntos personales, médicos y financieros de su hija durante la mayor parte de su tutela de casi 14 años antes de que un juez la rescindiera en noviembre de 2021.

Además el abogado de Britney, Mathew Rosengart, presentó la declaración de Ebadi como parte de una denuncia judicial en contra de su padre de 69 años, a quien señala de haber robado más seis millones de dólares de su patrimonio.

Asimismo se le acusa de usar su papel como tutor para promover su propio intereses personales y comerciales.

Rosengart había contratado a Ebadi, quien ahora trabaja como director gerente asociado en la práctica de Investigaciones Forenses e Inteligencia de Kroll Associates Inc., para investigar la gestión de la tutela por parte de Jamie.

Ebadi también reconoció que él interrogó y entrevistó personalmente a Alex Vlasov, el denunciante que alegó en el documental del New York Times “Controlling Britney Spears” en septiembre que Jamie había monitoreado el teléfono celular de Britney y puesto micrófonos ocultos en su habitación.