Las mascotas de Johnny Depp están en peligro luego de que el actor las introdujera ilegalmente a Australia sin pasar por el debido periodo de cuarentena que exigen las leyes del país.

“El señor Depp tiene 50 horas para devolver a sus perros a California o vamos a tener que sacrificarlos”, dijo ayer Barnaby Joyce, ministro de Agricultura, a modo de ultimátum contra Pistol y Boo, los dos perritos que Depp se llevó a Australia donde filma la quinta entrega de la franquicia cinematográfica Pirates of the Caribbean.

Primera mirada a Johnny Depp como “Jack Sparrow” en “Pirates of the Caribbean 5”

Las leyes de Australia requieren que los perros pasen 10 días en cuarentena antes de entrar al país. Según la revista People, Depp y su esposa, Amber Heard, arribaron el mes pasado y no declararon a los canes en aduana.

“Solo porque él es Johnny Depp no significa que esté exento de la ley australiana. Es un gran actor. Jack Sparrow es encantador, pero esta no es una excusa para ir por encima de nuestras leyes”, indicó Joyce al Sydney Morning Herald. 

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