El artista vallecaucano Julián Castillo vuelve a llamar la atención del mundo. Esta vez, llegó a un tanque de agua abandonado, ubicado debajo la estrella del barrio Siloé, en la ladera de Cali, para realizar varias obras con sangre donada por habitantes del sector.

Cinco voluntarios aportaron cerca de 250 mililitros del tejido vivo para que este artista nacido en el municipio de Roldanillo, quien ya tiene un Récord Guinnes con la pintura más grande hecha a lápiz, pintara por cerca de cinco horas al cantante puertorriqueño Residente.Y es que para Castillo, el rapero René Pérez Joglar “es un símbolo muy grande que pone a reflexionar a las personas con sus mensajes”.

Castillo explicó que prefiere ver la sangre llamando la atención por medio de la cultura y el arte y no derramada en las calles por enfrentamientos, guerras o en protestas.

Cabe explicar que la sangre es diluida en un pigmento para que no se oxide y así permanezca en la pared.Además del mural con la cara del cantante puertorriqueño, el artista pintó una paloma de la paz, también con sangre humana.El líder social John Freddy Guevara, quien invitó a Castillo para que realizara sus obras, dijo: “Queremos mandar un mensaje claro de que no queremos que se derrame más sangre en Colombia por guerras y por todos los conflictos que ha vivido el país, sino que esta vez vamos a derramar más sangre por arte y cultura”.