"Como dijo Gardel, ‘20 años no son nada’, pero 30 años está cabr&$”, fue el saludo de “Papo Swing” a quienes lo acompañaron el sábado en la noche en el Centro de Bellas Artes de Caguas para celebrar sus tres décadas de existencia.

Pero pareció que el reloj estuvo detenido durante todo este tiempo, y los fanáticos en la sala respondieron a cada palabra y movimiento suyo, como lo hacían cuando inició en las producciones de Luisito Vigoreaux en Wapa TV.

“Papo” demostró que sigue presente entre sus seguidores, mayormente hombres; que no necesita de grandes producciones para hacerlos reír; que con solo sacudir su colorido pañuelo le responden entusiastas “jua, jua, jua”; y que tiene el encanto con las mujeres, a quienes conquista con su labia.

Raulito Carbonell, el artista bajo la máscara de “Papo Swing”, desplegó todo su talento y energía para mantener el ritmo del show, que comenzó faltando poco para las 9:00 p.m. y terminó hora y media más tarde.

Fueron algunos de sus personajes los encargados de calentar al público narrando sus vivencias junto al más esperado de la noche. “Don Primitivo Rodríguez Heizel” -quien vio nacer a “Francisco Acuabella Bellaflores”, alias “Papo Swing”- sentó la pauta de lo que sería el resto del show, fórmula segura en muchos stand-up: anécdotas sobre sexo y malas palabras.

El arte está en cómo y cuándo decirlas, y Raulito supo hacerlo. Lo hizo con “Israel”, compañero de estudios de “Papo” en la Gabriela Mistral, y con el veterano soldado “Emilio Domínguez”, quien reveló en números, gracias a una memoria brutal, las hazañas en la cama del criado en Trastalleres.

El ansiado momento llegó, apareciendo el más querido sobre el escenario. Su swing, tanto para el baile como para el canto, se apoderó de la sala. Cinco músicos, que sonaron como una orquesta de 20, le acompañaron en lo que restó del show, con intervenciones musicales que llevaron a Raulito a sus años como vocalista de la orquesta de Rubby Haddock. Junto a ellos estuvieron cuatro bailarines, que activaron la vena salsera.

Muchos se quedaron con las ganas del junte con su mentor, Luisito Vigoreaux, quien no apareció entre los artistas que felicitaron a “Papo Swing” en vídeos que se proyectaron en la sala, entre ellos Chucho Avellanet, Oscarito, Gilberto Santa Rosa, Elvis Crespo, Wisin & Yandel y Víctor Manuelle, aunque fue nombrado en varias ocasiones, todas para vacilárselo. 

Pero fue refrescante ver actores como Dimary Castro, Ángel Figueroa y Limarie Amalbert, quienes se abren paso en el arte de la comedia. 

"30 años de Swing", una producción Molusco LLC con libreto de Carlos Vega con la colaboración de Carbonell, repite  el 17 de noviembre  en el Teatro Yagüez en Mayagüez, el 24 de noviembre en Bellas Artes de Juana Díaz, el 1 de diciembre en Bellas Artes de Humacao, y el 15 de diciembre en el Teatro Municipal 

de Cayey.