Ricardo Alegría resalta la gesta de jóvenes artistas
Expresó su satisfacción con la pintura en Casa Providencia. (Ve vídeo)
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 14 años.
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*Reproducimos una entrevista realizada a Don Ricardo Alegría el 28 de octubre de 2010
El respetado historiador, antropólogo y arqueólogo, Don Ricardo Alegría, resaltó la iniciativa de un puñado de jóvenes artistas, egresados de la Escuela de Artes Plásticas de San Juan, y de la Universidad de Puerto Rico, quienes en días pasados adornaron con hermosas pinturas -entre éstas una con su rostro- el mural de las instalaciones donde está ubicada Casa Providencia, en la calle Norzagaray del Viejo San Juan.
“Me alegra y llena de orgullo lo que están haciendo porque ahí veo el resultado de la labor que inicié cuando fundé la Escuela de Artes Plásticas. Desde joven me interesó mucho el arte. Yo tuve la ventaja de relacionarme con la pintura porque mi padre fue pintor. Papá coleccionaba pinturas de Campeche y Oller, este último fue su maestro. Yo sentía pena con los otros jóvenes que no tenían esa misma oportunidad porque no existía una escuela de artes plásticas. Por eso, cuando asumí la dirección del Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP), con las limitaciones que tenía, construí la Escuela de Artes Plásticas”, manifestó.
En entrevista con Primera Hora, desde su residencia en la calle Sol del Viejo San Juan, Alegría expresó su satisfacción con la pintura de su imagen, que le entregó el artista plástico David Zayas, autor de la obra. “Me da mucha alegría de que un joven se acuerde de este viejo de 89 años. Cuando me dijeron que la pintura la había hecho un egresado de la Escuela de Artes Plásticas, dije: ‘Pues la cosa va por buen camino’. Y al ver su pintura, siento que tuve razón cuando fundé la escuela para producir estudiantes como éstos”.
Zayas, quien llegó acompañado por el también artista Xavier Muñoz, agradeció a don Ricardo el haberlo recibido en su residencia. “Ha sido un honor para mí que me haya recibido y recibiera la pintura que le hice con tanto amor. Ahora siento más compromiso con mi labor cultural y del pueblo. Me da fuerza para seguir adelante y escribir la historia, a través de la pintura”, subrayó.
El proyecto Cuadros para las salas en el Viejo San Juan se realizó gracias a la iniciativa de Muñoz, quien consiguió que Sol Adela Domínguez, directora de Casa Providencia, avalara el mismo, para que sus siete compañeros -David Zayas, Rubén Luciano, Dialma Talavera, Damaris Cruz, Izan Zawahra, Rafael Acosta y José Antonio González- tuvieran un lugar donde plasmar sus pinturas inspiradas en los elementos del Viejo San Juan, sobresaliendo la figura del padre de la conservación de la vieja ciudad, don Ricardo Alegría.
En la intimidad de su hogar, en una de las salas engalanada de bellas pinturas, don Ricardo nos abrió su corazón y expresó las penas y alegrías, que le aquejan en estos momentos de su vida.
Don Ricardo, ¿cómo se siente a sus 89 años?
Sigo luchando porque siento que tengo que seguir defendiendo que los puertorriqueños conozcan más de nuestra cultura y estemos orgullosos de ser puertorriqueños. Ésa es la lucha que comencé hace 40 años y continuó. Espero que los jóvenes de la escuela sigan esa política.
¿Qué le preocupa?
Me preocupa que se le quiera quitar al Instituto de Cultura, Casa Blanca, que yo rescaté de los militares, edificio que cuando era niño no podría visitar porque era la residencia del general de Estados Unidos. Yo la convertí en un museo abierto al público. No me gustaría que la volvieran a cerrar. También me preocupa que se esté hablando de entregar a un alcalde las Ruinas de Caparra, que yo recavé e hice un museo.
Muchas de sus ideas fueron blanco de burla...
Muchas personas se burlaban de que yo estuviera hablando del cuatro en un mundo de guitarra eléctrica, pero yo continuaba adelante con mi empeño porque el cuatro es nuestro instrumento. Como quedaban pocos artífices, hice un concurso para descubrir si habían artesanos y descubrí que había 14. Me di cuenta que el cuatro estaba vivo y llamé a Francisco López Cruz para que me escribiera un método de cuatro y hoy día el cuatro se ha impuesto en la música.
¿Considera que las Fiestas de la Calle San Sebastián deben terminar?
Las Fiestas son la expresión más importante y auténticas de nuestra cultura nacional, de manera que deben continuar. Comparada con otras actividades que se hacen en Puerto Rico, hay pocas llamadas violaciones. Además, son la actividad cultural que más gente atrae de afuera a Puerto Rico… Es un grito de los puertorriqueños que hay que mantener y conservarlo como una tradición puertorriqueña.
¿Qué pedido le haría al gobernador de Puerto Rico Luis Fortuño?
Que respete al Instituto de Cultura Puertorriqueño, por la obra que se ha realizado allí. El ICP no es una entidad política. Si es política defender la nacionalidad, pues eso es otra cosa. El Instituto se fundó como una corporación pública, por eso yo pude servir bajo Don Luis A. Ferré.
Don Ricardo, ¿cómo le gustaría que el pueblo lo recuerde?
Como un puertorriqueño que dedicó su vida para que sus compatriotas conocieran más y mejor la historia de su país, para que estuvieran orgullosos. Mi padre me enseñó a conocer la historia de Puerto Rico y mi madre, que era de Loíza, me hablaba de las tradiciones de su pueblo. Por eso uno de mis primeros estudios fue La fiesta de Santiago Apóstol, en Loíza, donde se unen elementos de la herencia africana con elementos de la cultura española de edad media. Con esa tradición que heredé de mis padres, empecé a defender la cultura puertorriqueña desde niño que me obligaban a jurar la bandera americana para entrar a la escuela hasta los 89 años.