Don Chezina hará de las suyas en obra sobre casa embrujada
Dirigida a provocar risas, la pieza teatral Don Chezina Haunted Mansion presenta los enredos que surgen tras “la muerte” del reguetonero .
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 8 años.
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Es el año 2055 y el reguetonero Don Chezina ha muerto. Pero parece que unos asuntos pendientes no dejan a su alma descansar en paz.
Tras su partida del plano terrenal, un hijo no reconocido se entera de que es el heredero de su mansión de verano. Lo que el joven desconoce es de todas las vicisitudes -y el embrujo- que tendrá que pasar mientras intenta disfrutar de su herencia.
Escrita por Félix Monclova, Camila Monclova y José Luis Oyola, este dilema es el que da pie a la comedia teatral Don Chezina Haunted Mansion, que inicia hoy en el teatro Israel Shorty Castro (antiguo El Josco).
“Yo digo que es una comedia noventosa en un futuro espeluznante”, describe Félix, quien hace el papel de “Kike”, el hijo del músico urbano. “Es una comedia bien irreverente, bien loca, pero también estamos haciendo planteamientos sobre lo que está pasando con nosotros por la cuestión de las redes (sociales), de la caída de la televisión. De lo que ha pasado los últimos diez años con la generación”.
Kiko Blade, quien interpreta a “Rey”, aclara que “todo en el marco de la obra es una oda al reguetón noventoso, todo ese colorido de los 90. Hay muchas cosas que reflejan ese boom del reguetón de esos años, del 95 al 98”.
Camila, la realtor “Natasha”, añade que “el hijo llega con su mejor amigo, que es un influencer, y llegan a la casa a ver en qué estado está a ver si la van a vivir, si la arreglan, si la venden y allá está el antiguo mayordomo de Don Chezina”.
René Monclova, quien forma parte de la puesta en escena con sus hijos, hace de los personajes “Pap” y “Papo”. Uno de ellos es el vagabundo que vive en la casa embrujada, que ofrece sus servicios para remodelarla a cambio de que lo dejen quedarse un tiempo adicional en la propiedad. “Es una generación en el futuro que no tiene contacto con el pasado inmediato. No conoce nada de lo que pasó antes, no sabe quién es (Don Chezina)”, señala.
Por su parte, Oyola, quien le da vida a “Paul”, aclara que el personaje del reguetonero aparenta ser “diabólico siguiendo su propósito, pero en realidad él no es malo”.
El artista del género urbano, quien adelanta que interpretará en vivo sus temas, aclara que esta no será su primera experiencia en una pieza de teatro ya que lo hizo hace varios años en Ponce. “Fue del primer tema que pegué, que se llama Bien guillao de gangster, cuando hicieron una obra en base al nombre de esa canción mía y me incluyeron en la obra. Y participé, no así como actuando, pero participé cantando”.
¿Y por qué Don Chezina?
Félix no tarda en responder a esta interrogante. “Era mi ídolo de la niñez”. Según comparte, “yo siempre estuve en escuela pública y para ese momento era fuerte el reguetón, aunque para ese tiempo todavía era más la línea del rap”. Recuerda que en esos años de grado elemental “yo hacía que mami me comprara ropa y cosas para parecerme a Don Chezina”. Tendría 7 u 8 años “y estaba escuchando eso, y para papi era horrible”.
La pieza teatral Don Chezina Haunted Mansion se presentará hoy, viernes, y mañana sábado a las 9:00 p.m.; y el domingo a las 4:00 p.m. Será en el teatro Israel “Shorty” Castro (antiguo El Josco). Boletos disponibles a través de PRticket.com