El Tribunal Supremo determinó que no existe evidencia que acredite que la licenciada Isamar Correa Ruíz violentó los Cánones de Ética que exige la profesión de abogado tras las alegaciones de la productora Ivonne Class de que la instigó a firmar un contrato.

La información fue difundida por la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública mediante un comunicado de prensa.

Dice, además, que el Tribunal recomendó que se archive la causa, pues no ejercen la jurisdicción disciplinaria en este caso incoado por la también empresaria.

Por su parte, el presidente de WIPR, Ray Cruz, se reafirmó en que “todos los procedimientos de la Corporación se hacen conforme a la ley “.

Las alegaciones de Class fueron relacionadas a la oposición de la Corporación de firmar un contrato, del concierto “Acompáñame” de Chucho Avellanet y Lissette Álvarez, que era oneroso para las estaciones del pueblo de Puerto Rico.