Santa Fe, Nuevo México - Horas antes de que el actor Alec Baldwin disparara un arma de salva que le dijeron era segura y causara una muerte, un miembro del equipo de cámaras que filmaba la película en la que él participaba abandonó el trabajo en protesta por las condiciones y problemas de producción que incluían aspectos de seguridad.

Las disputas en la producción de la película del oeste “Rust” habían comenzado casi desde el principio a inicios de octubre y culminaron con el abandono del trabajo de siete miembros del personal de cámaras varias horas antes de la muerte de la cinematógrafa Halyna Hutchins, de 42 años.

Ese grupo de empleados había manifestado su disgusto con asuntos que iban desde los procedimientos a seguridad hasta sus alojamientos, según uno de ellos, quien solicitó el anonimato por temor a que sus declaraciones le perjudicaran sus perspectivas de futuros empleos.

Rust Movie Productions no respondió el viernes ni el sábado a correos electrónicos en los que se le solicitaron declaraciones sobre el asunto.

Durante un ensayo el jueves en el escenario en el lugar cinematográfico Bonanza Creek Ranch, en las afueras de Santa Fe, Baldwin utilizó fue una de tres armas de fuego que un especialista en armas, o “armero”, había colocado en un carrito afuera del edificio donde la escena era practicada, según expedientes judiciales.

De acuerdo con los documentos, un director adjunto, Dave Halls, tomó un arma de salva y la entregó a Baldwin, a quien indicó incorrectamente con un grito dee “arma fría” que el instrumento no estaba cargado con cartuchos de verdad.

Cuando Baldwin jaló el gatillo, sin querer mató a Hutchins e hirió al director Joel Souza, quien estaba a un lado de ella dentro de un inmueble de madera similar a una capilla.

Baldwin, de 63 años, conocido por sus papeles en “30 Rock” y “The Hunt for Red October” y su representación del expresidente Donald Trump en el programa “Saturday Night Live,” ha descrito el homicidio como un “trágico accidente”. Él era uno de los productores de “Rust”.