El director Ramón “Moncho” Conde apuesta al cine comunitario para combatir problemáticas sociales como la violencia y la criminalidad.

El artista celebra el tercer Encuentro de Cine Joven, en el que se apreciarán los trabajos audiovisuales de los habitantes de los residenciales Brisas de Bayamón, San Fernando y Las Dalias. El evento se llevará a cabo mañana, miércoles, a las 7:00 de la noche, en el cine Fine Arts Café en Hato Rey.

En la actividad se proyectarán tres cortometrajes: Amnesia (Brisas de Bayamón), 24 horas (Las Dalias) y Paso a paso (San Fernando), dirigidos por Moncho Conde, y con el respaldo de Cost Control Company y la Administración de Vivienda Pública.

“Los cortometrajes son un espejo de la realidad, pero desde un punto de vista positivo. Todas las historias que ellos me dan son negativas. Casi todos quieren hacer la historia del punto de drogas, pero siempre buscamos la manera de transformarla. Les hago ver el problema y sus consecuencias. El juego termina siendo una película positiva”, mencionó el actor y dramaturgo, quien contó con la colaboración de Jay Andújar en la edición.

Conde explicó que el filme Amnesia se centra en el abandono de ancianos por parte de sus familiares. La cinta se grabó con un grupo de personas de edad avanzada del complejo público que, por primera vez, se expuso al medio cinematográfico.

“Trata sobre este señor cuya hija no lo visita, y las necesidades que él vive. El mensaje es que los vecinos se unan para ayudarlo. Se trata de buscar una solución a sus propios problemas”, expresó Conde, quien se reúne con los residentes de lunes a viernes, en las tardes, como parte del taller de cine comunitario. Añadió que el cortometraje 24 horas presenta a una joven que no les informó a sus padres dónde se encontraba, lo que provocó una confusión al punto de que creyeron que era víctima de un secuestro.

La tercera película, Paso a paso, muestra a un grupo de baile. “Es la historia de un grupo de baile al que no se le da el mérito que merece”, comentó.

Conde dijo que la idea de los encuentros de cine es preparar la película, pero sobre todo discutir en grupo el problema que se expone y buscar soluciones reales. “El cine ha sido una experiencia fuerte para ellos, porque los hace sentir que verdaderamente valen en el residencial. Se trata de una noticia positiva en vez de la noticia negativa que sale todos los días. A mí me encantaría abrir un encuentro de cine con todos los residenciales que tengan cortometrajes para exhibirlos. Estos trabajos los mantienen ocupados”, mencionó.

El educador se cuestionó por qué el Gobierno sólo aúna esfuerzos en el deporte, en vez de respaldar también el teatro y el cine como métodos para alejar a los jóvenes de la criminalidad y las drogas.

“Se ha puesto toda la esperanza en el deporte. No todo el mundo juega baloncesto. También tenemos mucha gente adulta que no hace nada. Debemos darle apoyo a este tipo de trabajo y verán que todo empieza a funcionar. La criminalidad en el residencial baja si está todo el mundo pensando cómo hacer o participar en una película”, puntualizó Conde, quien, además del encuentro de cine, organiza un festival de teatro infantil con la comunidad de estos residenciales.