Dwayne Johnson es luchador profesional, actor, empresario, hombre altruista y ahora superhéroe.

Cualquiera pensaría que no le falta nada, pero para él siempre habrá una meta más allá de lo profesional: ser un mejor papá cada día. Más allá de aumentar los músculos que todos los días trabaja, crecer como padre es su prioridad.

“Cuando tuve a mi primera hija, ahora ella tiene 21, yo todavía tenía 29, era otro chico y crecimos juntos, así que ahora que soy un poco mayor y tengo pequeñas que tienen seis y cuatro años ser padre es más importante para mí”, afirma Johnson en entrevista con El Universal.

“Con toda esta experiencia en mi haber, ser un mejor padre sigue siendo mi impulsor número uno y asegurarme de que estoy presente incluso cuando estoy tan ocupado”, agrega.

El actor de 50 años se ha vuelto cada vez más reflexivo sobre la familia, pues recuerda que cuando era niño no sintió que tuviera un núcleo estable, algo que siempre ha evitado replicar con sus hijas.

“No crecí en una familia”, señala “The Rock”.

“Fui hijo único y sé lo que es tener una relación complicada con mi papá, porque él siempre estuvo fuera, así que crecí con mi mamá, aunque siempre amé a mi papá y por eso creo que la idea de la familia es muy importante para mí”, explica.

Por esta razón es que uno de los pilares en su carrera ha sido su madre, Ata Johnson, a quien constantemente le reconoce la labor que hizo al formarlo.

Johnson asegura que la característica necesaria en todas sus películas siempre será la familia. Algunos ejemplos son “Moana”, “Fighting with My Family” y “Jumanji”.

“A veces se trata de familias un poco rotas, o viven algo complicado, como en mi vida”, destaca.

Ahora, con su primer papel como héroe de DC en la cinta “Black Adam” da vida a un padre que heredó de los dioses ciertos poderes, sin embargo él prefiere renunciar a ellos con tal de recuperar a su esposa e hijo.

Esta fue la principal motivación que convenció a Johnson de participar.

“‘Black Adam’ explora lo que sucedería si pierdes a tu familia y eres el único que queda, pero con tus poderes... Cualquier otra persona en la Tierra lo abrazaría, pero él dice: ‘no lo quiero’ “, establece.

Para Dwayne este es un antihéroe filosófico, más profundo, en quien, si los fanáticos de la acción ponen atención, encontrarán un mensaje familiar y también de comunicación.

“Soy un gran defensor de que no siempre tenemos que estar de acuerdo, pero eso es algo bueno, porque es como un mecanismo forzado para que nos comuniquemos”, considera el actor.

“Como cuando tengo un desacuerdo con alguien de mi equipo o con mis hijas, lo más importante es comunicarse”.

La cinta que estrena hoy en las salas de cine también cuenta con la aparición por primera vez del la Sociedad de la Justicia, un grupo de héroes interpretados por los actores Pierce Brosnan, Aldis Hodge, Quintessa Swindell y Noah Centineo.

Ambientada en un universo claramente inspirado por las ciudades de oriente medio, “Black Adam” arranca con su protagonista confundido al encontrar que la antigua civilización en la que creció, Kahndaq, es una metrópolis moderna que nada se parece a los viejos tiempos.

“Hay una área gris en la que el espectador puede no estar de acuerdo con Black Adam y lo que hace, pero lo entiendes porque está lleno de rabia”, argumenta. Esa confusión entre el mal y el bien, una división que a veces resulta demasiado evidente en el género de superhéroes, es lo que para Johnson hace de este título una propuesta “más convincente”.

Por: Nicole Trejo / El Universal / GDA