Hace dos años el maestro puertorriqueño Pascual Cubero Soto, radicado en el estado de Indiana, publicó un tuit lamentando que cada vez veía más lejos la posibilidad de conocer a su personalidad favorita, la comediante y presentadora estadounidense Ellen DeGeneres.

Jamás imaginó que la dinámica diaria de enseñanza lo llevaría, de forma casual, a lograr su deseo y mucho más que eso, pues no solo hizo contacto con Ellen, sino que la producción del programa les regaló $10,000 para la escuela en la que trabaja y otros $10,000 para él, entre otros artículos.

El educador, natural de San Sebastián, compartió esta mañana con Primera Hora que uno de sus estudiantes comenzó a leer un libro acerca de los animales, en especial el tema sobre los gorilas, una especie primate que la fundación de Ellen protege en un campus en Ruanda.

“El estudiante vino donde mí a decirme datos del libro, como ‘Profesor usted sabía que el gorila macho hace esto y la gorila hembra hace esto’, entonces le dije, ‘Ellen tiene una fundación de gorilas que ella protege para que puedan crecer’, y ahí es que se da toda la dinámica de que el niño no conoce a Ellen, y otro de mis estudiantes le dice, ‘Cómo es posible que no conozcas a Ellen, si Ellen es como Jesucristo, que todo el mundo la conoce, es superbondadosa’, y esa es la anécdota que publico en Twitter, sobre lo que pasó en mi salón”, relató Cubero Soto del suceso que provocó la reacción inmediata de la famosa.

“Cuando publico esa historia es que ella responde que le diga a mis estudiantes que ella es su amiga personal”, continuó. “Al otro día les enseño el tuit a los chicos, pero grabo la reacción de los niños y ahí publico el vídeo y ahí se fue viral y los de la fundación me llaman, que les quieren enviar a los chicos unas botellas para agua en gratitud porque están hablando de los gorilas y los niños hicieron la cajita para colectar fondos para la fundación”.

A partir de ese momento, la producción de la fundación, en complicidad con “The Ellen DeGeneres Show”, le pide que se enlace a través de la plataforma de Zoom para indagar un poco más sobre el interés de los estudiantes. La sorpresa fue que al otro lado del monitor apareció la presentadora en plena transmisión del show para reconocer a los estudiantes y agradecerle a él toda su admiración.

“Todavía no me lo creo”, manifestó del momento en el que él se tapó el rostro con las manos y solo repetía “Oh, my God!”. “Para mí ella es un modelo a seguir”, afirmó.

“El éxito de Ellen vino cuando tenía 45 años, que fue cuando inició el programa. Antes de eso tenía éxito, pero al declararse gay, las puertas se le cerraron, y fue entonces a los 45 años que le dieron la oferta del programa y ahí fue cuando el éxito de ella, catapultó de manera gigante”, sostuvo.

“Y hay veces que con este cambio, esta transición acá, me sentí como que, ‘Dios mío, qué más me puede pasar’, voy para 35 años y no he logrado lo que quiero, y la vi como un ejemplo de que si ella con 45 años, logró tener éxito siendo mucho mayor que yo, significa que todavía tengo break de hacer algo, y siempre la he admirado mucho”, agregó Cubero Pascual, quien además es conductor de Uber y confecciona bizcochos.

La decisión más difícil de su vida

Cubero Soto se radicó en Indiana hace dos años tras ser contratado como maestro en una escuela de inmersión, donde el 90% de las materias se ofrecen en español y se promueve el aprendizaje autónomo entre los estudiantes.

Contó que aceptó ir a la entrevista en la Universidad Interamericana en Puerto Rico sin mucha expectativa, porque no veía la manera de establecerse en un lugar donde no conocía a nadie, aparte, tendría que separarse de su familia, lo que representó la parte más difícil.

En la Isla trabajó por varios años como maestro transitorio, teniendo que cambiar de escuela y lugar vivienda con cada inicio de semestre. El primer año de semestre le asignaron una escuela en Vieques.

“Empecé como todo el mundo, durmiendo en un matress en el piso y poquito a poquito, un día a la vez, iba a progresando paso a paso”, compartió. “Prometí que cuando viniera acá no iba a caer en este ciclo de comparar Puerto Rico, pero ciertamente es imposible no poder comparar, o al menos considerar las diferencias porque son tan notables. La escuela me provee muchas cosas. En Puerto Rico ganaba $21,000 al año, acá estoy empezando en $50,000, nada más por ahí es una diferencia”, expuso, quien aún mantiene el empleo en Uber y elaborando bizcochos.

“Decidí continuarlo acá para recuperar lo que perdí cuando me mudé y poder echar pa’lante, y a medio año de mudarme, mi papá cayó enfermo con demencia, que esa también fue unas de las razones por las que tuve que seguir trabajando doble, y pues, ha sido una montaña rusa de sucesos que me han llevado donde estoy”.

Ayer el maestro les hizo un pijama party a los estudiantes para ver juntos la transmisión de la sorpresa que no solo recibió él, sino todos sus estudiantes.

“Ahí se enteraron que Ellen les iba a hacer embajadores, les iba a enviar las camisetas, les enviará un dinero para la escuela para ayudas tecnológicas, porque con esto de la pandemia los niños se tienen que llevar las computadoras para las casas, y las rompen o se dañan, o siempre tienen problemas; que me ayudó a mí, y ellos están insoportables, se creen estrellas de Hollywood, dicen que conocen a Ellen”, relató.