Hace poco más de dos semanas que Netflix estrenó la serie “Monsters: The Lyle and Erik Menéndez Story”, que narra la perturbadora y sensacional historia de Erik y Lyle Menéndez, los hermanos de Beverly Hills que asesinaron a sus padres una noche mientras éstos veían tranquilamente la televisión en su sala de estar.

Creada por Ryan Murphy, se basa en el juicio que cautivó al público en los años 90, especialmente cuando la opinión pública cambió drásticamente tras la revelación de que los hermanos habían sufrido años de abuso emocional, físico y sexual extremo a manos de sus padres.

En consecuencia, Murphy y Netflix no escatimaron esfuerzos, reuniendo un elenco estelar que incluye a Chloë Sevigny como Kitty Menéndez y a Javier Bardem como José, con los recién llegados Nicholas Chávez y Cooper Koch en los papeles de Erik y Lyle, respectivamente.

Cooper Koch, Chloë Sevigny, Javier Bardem y Nicholas Chávez protagonizan la serie.
Cooper Koch, Chloë Sevigny, Javier Bardem y Nicholas Chávez protagonizan la serie. (Suministrada)

Los actores compartieron cómo se prepararon para los roles de esta serie, que ha cautivado a las audiencias del gigante de “streaming” desde su estreno y justo cuando la plataforma se apresta a lanzar el lunes el documental “The Menendez Brothers”, en el que los hermanos y varios de los implicados en el caso revisitan los hechos.

Intensidad y sensibilidad

La actriz Chloë Sevigny, conocida por su capacidad de dar vida a personajes complejos, destacó la profunda inmersión que realizó para interpretar a Kitty Menéndez.

“Vi mucho material de los juicios en televisión y leí los artículos de Dominik Dunne en Vanity Fair y cualquier otro libro que pudiera encontrar”, comentó Sevigny.

Es evidente que la investigación exhaustiva fue clave para que la actriz lograra captar la esencia de Kitty. Además, Sevigny reconoció que esta serie aborda el caso con una sensibilidad renovada, destacando cómo las conversaciones sobre salud mental y abuso sexual han cambiado drásticamente en las últimas décadas.

“Hoy en día podemos investigar estos temas de una manera que antes se evitaba”, afirmó.

Trabajar con Javier Bardem también fue una experiencia especial para Sevigny.

“Fue increíble. Javier trae una intensidad y pasión al trabajo, pero también una gran sensibilidad. Su amor por la actuación y los actores se refleja en cómo cuida a todos los que lo rodean. Es muy generoso”, dijo con admiración.

Bardem, por su parte, explicó cómo se preparó para el papel de José Menéndez, un personaje enigmático del que hay poca información más allá de lo que los propios hermanos Menéndez contaron en sus testimonios.

“No hay mucha información sobre José, así que confié en el material escrito por Ian Brennan y Ryan Murphy. Ellos realizaron una investigación profunda a lo largo de los años, y a partir de ahí traté de encontrar la humanidad en él”, expresó.

En cuanto a su experiencia en el rodaje, Bardem destacó la calidad del equipo: “Estábamos rodeados de profesionales de primer nivel. Ryan Murphy es un maestro, y el elenco fue una locura de bueno. Fue cuestión de confiar en el proceso”.

Nuevas voces para una vieja tragedia

Nicholas Chávez, quien interpreta a Erik Menéndez, describió cómo abordó la complejidad emocional de su personaje.

“Lo que hace que estos personajes sean interesantes es que son la suma de todas sus partes. Constantemente evolucionan, y yo tenía que formar una interpretación que fuera un compendio de todas estas diferentes facetas”, explicó.

Para prepararse, dedicó tiempo a ver documentales y entrevistas sobre los hermanos, asegurándose de ser lo más minucioso posible.

Por su parte, Cooper Koch tuvo una experiencia única al conocer a los propios Lyle y Erik Menéndez tras el estreno de la serie.

“Tuve la oportunidad de ir a la cárcel Richard J. Donovan en San Diego, donde están cumpliendo cadena perpetua. Fue una experiencia muy emotiva, escuchamos a varios reclusos compartir sus historias, y me sorprendió la vulnerabilidad y amabilidad de todos ellos”, comentó Koch.

También compartió que tuvo una conversación telefónica con Erik Menéndez la noche anterior al estreno de la serie.

“Le dije que creía en él y que hice todo lo posible como actor para interpretarlo de la manera más auténtica posible”, recordó.

Uno de los aspectos más impactantes del caso, según Koch, es cómo en los años 90 resultaba difícil para el público aceptar que el abuso sexual masculino, especialmente entre padre e hijo, podía ocurrir.

“La gente prefería creer que lo habían hecho por el dinero. Pero ahora, después de 35 años, tenemos mucha más evidencia sobre el abuso sexual infantil y creo que merecen un nuevo juicio”, dijo Koch.

Testigos de la tragedia

Nathan Lane, quien interpreta al difunto reportero de Vanity Fair Dominick Dunne, admitió que antes de trabajar en la serie no había seguido de cerca el caso Menéndez, pero su conocimiento se expandió al sumergirse en el material.

“Una vez que empiezas a ver los testimonios del tribunal y toda la investigación, es realmente perturbador”, comentó Lane.

Para él, el caso es mucho más complicado de lo que parecía inicialmente.

“Creo que al principio era fácil pensar que eran dos chicos ricos y malcriados que mataron a sus padres por la herencia, pero la verdad es mucho más compleja”, afirmó.

Ari Graynor, quien interpreta a la abogada de defensa Leslie Abramson, destacó la importancia de mostrar todas las perspectivas en esta serie.

“Queríamos presentar muchos puntos de vista y dejar que la audiencia decidiera”, señaló la actriz, quien también subrayó la relevancia de abordar el trauma y sus consecuencias en la vida de las personas.

El caso Menéndez, con toda su complejidad y tragedia, continúa cautivando al público más de 30 años después.

Como señaló Javier Bardem en el estreno de la serie en Los Ángeles: “Se trata de las consecuencias del trauma. A menos que se aborde y se cure adecuadamente, tendrá un efecto horrible y dramático en las generaciones venideras”.

La serie “Monsters: The Lyle and Erik Menéndez Story” no solo ofrece una representación de los crímenes cometidos, sino que también invita a reflexionar sobre los efectos del abuso no resuelto y cómo la percepción pública de estos crímenes puede cambiar con el tiempo.

Ryan Murphy, junto a su equipo, ha logrado con esta serie no solo traer de vuelta un caso que marcó una época, sino también ofrecer una nueva visión que nos obliga a cuestionar nuestras creencias y a reconsiderar cómo entendemos el trauma y la justicia.

Nueva vista

Casi coincidiendo con la serie como con el documental que estrena hoy han surgido desarrollos en el caso que ha llevado a la fiscalía de Los Ángeles a anunciar una vista para revisar la sentencia de los hermanos.

El jueves pasado, George Gascón, fiscal de distrito para el condado de Los Ángeles indicó que su oficina revisa nueva evidencia para determinar si Eric, hoy de 53 años, y Lyle, de 56, deben servir cadenas perpetuas por los crímenes cometidos hace 35 años.

Gascón aclaró que no hay duda de que los hermanos mataron a sus padres, pero dijo que la fiscalía examinará si a la luz de la nueva evidencia existe espacio para una orden de resentencia.

La vista está programada para el próximo 29 de noviembre.