Hace dos años Carlos McConnie lo arriesgó todo. Dejó un salario fijo para probar suerte en el inestable ambiente artístico y no se arrepiente, ya que no sólo le ha ido bien como animador, sino que también ha logrado uno de sus sueños, actuar.

Es en la piel de un psicópata que logra abrirse paso en la actuación al formar parte de la película para la televisión El corillo, producida por Vicente Castro y Jorge Luis Ramos, que se emitirá por Univisión Puerto Rico.

La trama de esta producción, que se terminó de filmar hace dos semanas, versa sobre un grupo de jóvenes que se reúnen en un centro de tutorías donde se preparan para el College Board, en donde salen a relucir todas sus vicisitudes, problemas familiares e historias de amor.

Para no haber tenido ningún tipo de experiencia en la actuación, el también coanimador del programa Flashazo VIP, emitido los jueves por Univisión, se siente satisfecho con su trabajo actoral en la piel del psicópata “Ricky”, por lo que tiene la confianza de que se le abrirán las puertas para nuevos proyectos.

Describe a su personaje como “alguien bien diferente a mí. Es un tipo obsesivo, es una persona agresiva y está trastornado y enfermo mentalmente. Tiene altas bien altas y bajas bien bajas y es un personaje bien complejo. Para mí fue un gran reto hacer un personaje como ése”.

Como parte de su caracterización, se obsesionará con su hermana “Alicia”, interpretada por María Coral, que tendrá como novio a “Dereck”, encarnado por Rafael Albarrán.

Para McConnie, todas las escenas fueron intensas y hasta lloró. Siente que sus clases de dicción, actuación y locución fueron su mayor herramienta para darle vida a “Ricky”.

Además, se nutrió para su personaje viendo películas que le sugirió Vicente Castro y buscando información de las características de los psicópatas en la Internet.

“Vi varias películas, soy amante del cine, y cuando tengo tiempo libre veo películas. Hice una investigación en la Internet de cuál es el comportamiento de un individuo como éste”, dice el animador, cuyo look para esta entrevista estuvo a cargo de Anthony Quintana y Willie Rosado.

Pese a que siente que su dramatización fue excelente, el también modelo confiesa que “aprenderme las líneas me preocupó mucho y fue mucho trabajo, pero lo disfruté en cantidad”.

Para él fue bien gratificante que una vez culminada sus escenas en el rodaje, la reacción positiva de los compañeros, así como la de Vicente Castro, le motivaron mucho.

“Los respeto mucho y su reacción me dio mucha satisfacción. Me muero por ver la película. Vicente es una de las personas que constantemente, digan lo que digan, se ha mantenido abriendo talleres de películas en Puerto Rico y dándole foro a los técnicos locales”, acota con simpatía.

McConnie desea desarrollarse como actor, pero reconoce que en Puerto Rico no hay mucho taller para la actuación. Además, siente que la gente “a lo mejor me van a ver como el modelito o animador y a lo mejor no van a querer darme la oportunidad. Vicente Castro me dio la oportunidad y quiero demostrar que puedo actuar y que puedo ser exitoso, y sé que al igual que llegó esta oportunidad podrán venir otras, por eso estoy preparándome”.

“Muchas veces los proyectos son un grupito cerrado y no se le da oportunidad a personas nuevas y con proyectos”, precisa el artista.

Tatiana sabe de su personaje

Su novia, la bailarina Tatiana Delgado, sabe de la actuación de Carlos McConnie, pero no estuvo en ninguno de los ensayos ni en la filmación.

“Ella no lo ha visto, sino lo que le ha contado. Yo soy muy tímido para ensayar, que las escenas intensas a mi capacidad las hice en el momento (de filmar), pero al ensayarlas me da una timidez que no me atrevía”, narra.

Agrega que “aunque hay gente que no me lo cree, soy bien tímido. Yo quería ensayar más las escenas, pero al momento de la escena, salía todo lo mejor de mí (bajo la presión)”.