“Black Swan”: rivalidades, accidentes y romances detrás de la película
Durante el rodaje, Natalie Portman y Mila Kunis tuvieron que atravesar diversas exigencias físicas y emocionales.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 4 años.
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Galardonada y aclamada por la crítica, Black Swan (2010) logró convertirse en un clásico del cine.
Detrás del psicothriller de horror protagonizado por Natalie Portman y Mila Kunis, en torno de la obsesiva búsqueda de la perfección, hay llamativas historias, entramados y romances ocultos que se dieron durante la filmación.
Los secretos detrás del rodaje fueron develados en una publicación en las redes sociales que rápidamente se volvió viral.
Según explicó el usuario Leonel Pérez, el director de la película, Darren Arnofsky, le presentó la idea a Portman en el año 2000 y tardó 10 años en llevarla a cabo. La actriz tenía experiencia en el ballet y lo practicaba desde los 12 años. Incluso, un año antes de empezar a filmar, decidió retomar sus clases.
Difícil requerimiento: “Uno de los mayores retos para Natalie fue cambiar el tono de su voz, anteriormente varios directores le habían criticado su voz dulce, por lo que ella había decidido trabajar con entrenadores vocales para hacerla más profunda. Para esta película Natalie tuvo que volver a ese tono”, explicó Pérez en Twitter.
Exigencias físicas: según trascendió, Kunis obtuvo el papel de “Lily” a través de una entrevista por Skype con Arnofsky luego de que Portman la recomendara para el papel. Lograr el personaje fue una tarea complicada, y Mila contó que para llegar al peso ideal solo consumía 1,200 calorías por día. Además, fumaba varios cigarrillos diarios. Todo eso le permitió pasar de 53 a 43 kilos (94 libras) en poco tiempo. Portman, por su parte, tardó diez meses en llegar al peso ideal de su personaje, perdiendo 9 kilos.
Situación incómoda: Portman reveló que el director intentó crear una “rivalidad” entre ella y Kunis para que durante las filmaciones la tensión entre ambas en la pantalla fuera lo más real posible. Para lograrlo, les mandaba mensajes a cada una elogiando la actuación y baile de la otra.
Espacio para el amor: Portman se enamoró del coreógrafo de la película, Benjamin Millepied, quien también interpretó a un bailarín en el film. La pareja tuvo un hijo en 2011 (Aleph) y una hija en 2017 (Amalia).
Una filmación accidentada: a pesar de ser una película conocida, el presupuesto era muy ajustado. Incluso, cuando Portman sufrió una lesión en sus costillas, se le notificó que la producción no podía costear un médico. “Ella respondió pidiendo que le quitaran su remolque y le contrataran un médico. Al día siguiente, el remolque de la actriz había sido retirado del set. Una fisioterapeuta la atendió y el proceso de consultas y masajes fue grabado para la película”, relató Pérez. Portman sufrió otro accidente al golpearse fuertemente la cabeza durante una escena. El golpe fue tan duro, que experimentó una conmoción cerebral grave por lo que se le hizo una resonancia magnética, pero finalmente no fue nada preocupante.
Éxito total: el presupuesto para la filmación era de 13 millones de dólares y la película logró recaudar más de 300 millones en taquilla. “A diez años desde su estreno, Black Swan es considerada una obra maestra de los thrillers psicológicos y la actuación de Portman fue alabada por la crítica”, observa Pérez.
Premios y galardones: La actuación de Portman la hizo ganadora de 23 premios por su interpretación, casi la totalidad de todas las nominaciones que recibió el film. Por su parte, Kunis también fue nominada a un Globo de Oro, pero confesó que estaba “tan segura que no iba a ganarlo que no se molestó en pensar en un discurso de aceptación, en cambio bebió varios vodkas en el camino a los premios”.
Polémica con la doble: los premios de Portman generaron polémica luego de que Sarah Lane, su doble para las escenas de baile, asegurara que la actriz solo había actuado el 5%. En su momento, tanto el director como Kunis salieron en defensa de Portman y afirmaron que de las 139 escenas de baile que se hicieron, 111 son de Portman y el resto de la doble. Si bien tras los dichos se cuestionó si Portman merecía haber ganado el Óscar a “Mejor actriz”, para el autor del posteo, “quien nos lleva durante toda la película en los conflictos emocionales de Nina es Natalie, no una doble, por lo que su premio no debe ser tema de discusión”.
Tensión e incomodidad: Mila contó que Portman se sintió incómoda al grabar la escena sexual entre las dos, pero que finalmente terminó entendiendo que el despertar sexual del personaje era clave. “Luego del estreno, las escenas sexuales de la película terminaron en portales pornográficos. Sobre esto Natalie mencionó que se sintió bastante decepcionada y triste ya que su cara fue la imagen de varios sitos XXX durante varios meses”, definió Pérez.