Alec Baldwin tras la muerte de Halyna Hutchins: “Ella era mi amiga”.
El veterano actor se dirige por primera vez a los medios tras el accidente en set que terminó con la vida de la cinefotógrafa.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 3 años.
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“Ella era mi amiga”.
Mirando a cámara, notablemente afligido y nervioso, Alec Baldwin rompió el silencio y se refirió, por primera vez en los medios, a la muerte de la directora de fotografía Halyna Hutchins en el set de Rust, cuando el actor disparó un arma que debía estar cargada con balas de fogueo y, por accidente, terminó con la vida de Hutchins.
“Hay accidentes en los sets de filmación de vez en cuando, pero nada como esto”, expresó Baldwin, con aspecto algo descuidado y con la voz quebrada, ante el requerimiento de un reportero de la agencia BackGrid.
Alec Baldwin speaks out on the fatal shooting of cinematographer Halyna Hutchins on the set of RUST:
— The Recount (@therecount) October 30, 2021
“She was my friend ... We were a very, very well-oiled crew shooting a film together, and then this horrible event happened." pic.twitter.com/QzVISWk8Qy
El actor accedió a responder algunas preguntas luego de que los periodistas persiguieran el auto en el que viajaba junto a su esposa Hilaria y sus hijos.
“Mis chicos están llorando en el auto porque ustedes nos estuvieron siguiendo, por eso decidí detenerme a hablar como un gesto de cortesía, pero no estoy autorizado a hacer comentarios sobre la investigación. Hablo con los policías todos los días”, explicó al actor, ante la atenta mirada de su esposa, que bajó del vehículo junto a él y filmó todo el intercambio con su celular.
La improvisada entrevista se produjo al costado de la carretera en Vermont. De hecho, en el video que fue reproducido por varios portales estadounidenses, se escucha el constante ruido de los automóviles pasando a su lado. “Este es un episodio de uno en un billón, un evento de uno en un billón”, repitió el actor.
Esta es la primera vez que Baldwin se refiere en público al episodio en el que Hutchins perdió la vida y resultó herido el director de la película, Joel Souza, mientras filmaban en la localidad de Santa Fe, Nueva México. En un momento de la charla, tanto el actor como su esposa se indignaron cuando uno de los periodistas no pudo recordar el nombre de Hutchins. “¿No sabés su nombre? ¡Vamos!”, exclamó Baldwin, mientras su esposa, enojada, repetía: “Se llamaba Halyna”.
A su vez, el actor se mostró agradecido por las discusiones que se generaron en torno a la eliminación de las armas en las producciones cinematográficas de Hollywood. “Lo que tenemos que entender es que cuando una tragedia como esta ocurre deben tomarse nuevas medidas... Pistolas de utilería, nada de balas reales en el set. No me cabe a mí tomar la decisión, pero es urgente... Es urgente que lo entiendan. No soy un experto en la materia, pero con lo que las personas capacitadas decidan que es lo mejor para elevar la seguridad en los sets, estaré de acuerdo y cooperaré del modo en que pueda”.
“Una mujer murió. Ella era mi amiga, ella era mi amiga”, repitió Baldwin. Y agregó: “Cuando llegué a Sante Fe para empezar a rodar, la llevé a cenar junto a Joel, el director. Éramos un equipo muy, muy bien ensamblado filmando una película juntos cuando ocurrió este horrible evento”.
El actor indicó, además, que está en “contacto permanente” con Matthews, el marido de Hutchins y padre de su único hijo, de 9 años. “Estamos muy preocupados por su familia”, aseguró el actor, y contó cómo los halló el día que se reunió personalmente con ellos, tras la muerte de la directora de fotografía: “No podría describir cómo estaban, están mortificados. Su marido está muy agobiado por todo lo que pasó. Está en shock por su hijo”, explicó.
Además, se disculpó por no poder dar precisiones sobre cómo sigue el caso, por pedido del alguacil de Santa Fe. “No estoy autorizado a hacer ningún comentario porque hay una investigación en curso. He recibido la orden por parte de la oficina del alguacil, y no puedo responder preguntas sobre esta investigación”.
La noticia sacudió a las redes y no tardó en acaparar todos los medios estadounidenses: Baldwin disparó un arma durante un ensayo y mató accidentalmente a la directora de fotografía Halyna Hutchins e hirió al director Joel Souza. El incidente ocurrió el jueves 23, a las 13.50, en el set de Rust, una película independiente que se estaba filmando en Bonanza Creek Ranch, un popular lugar de producción al sur de Santa Fe, Nuevo México.
Según se informó a la prensa, Hutchins, de 42 años, fue transportada en helicóptero al Hospital de la Universidad de Nuevo México en Albuquerque, donde finalmente murió. Souza, de 48 años, fue trasladado en ambulancia al Centro Médico Regional Christus St. Vincent en Santa Fe, donde recibió atención de emergencia.
A través de un comunicado, la oficina del alguacil del condado de Santa Fe expresó que las dos víctimas “recibieron disparos cuando Alec Baldwin, de 68 años, productor y actor, disparó un arma de fuego”. Hutchins se graduó del American Film Institute en 2015 y había trabajado en varios cortometrajes antes de rodar Archenemy, un largometraje de 2020 protagonizado por Joe Manganiello. “Es una persona maravillosa, positiva y creativa que estaba muy emocionada de abrirse camino y hacer películas”, dijo Michael Pessah, un director de fotografía que era amigo de Hutchins. “Ella estaba realmente en alza”, expresó.
Souza es director y guionista de la película que también está protagonizada por Frances Fisher, Jensen Ackles, Brady Noon y Travis Fimmel. Además de actuar en la película, Baldwin era coproductor. Allí interpreta a un forajido, Rust, cuyo nieto de 13 años es condenado por una muerte accidental. Fimmel, a su vez, le da vida a un cazarrecompensas que intenta atraparlos cuando nieto y abuelo deciden escapar.
Este miércoles, los investigadores del caso realizaron una conferencia de prensa en Santa Fe, Nuevo México, en la que confirmaron que habrá que esperar varios días más para que culmine la etapa de análisis y pesquisas orientadas a determinar por qué había una bala de plomo en el arma disparada por Baldwin en el set. “Es demasiado temprano para hablar de cargos o acusaciones. Lo que creemos es que hubo un exceso de confianza en el set, así como algunas cuestiones relacionadas con la seguridad que deberían ser consideradas por la industria y también por el Estado de Nuevo México”, dijo el sheriff del condado de Santa Fe, Adam Mendoza.
Los investigadores secuestraron dentro del set unas 500 municiones, entre las cuales había balas de fogueo, proyectiles sin carga explosiva y lo que sospechan que son “balas de verdad”. Mendoza también contó que tienen en su poder la bala mortal que había quedado alojada en el hombro del director Souza. El funcionario judicial agregó que queda pendiente una nueva ronda de entrevistas con testigos e integrantes de la producción, así como la continuidad de la búsqueda de posibles indicios o pruebas.
La fiscal Mary Carmack-Altwies indicó, a su vez: “Todas las hipótesis están sobre la mesa. No descartamos ninguna”. Las personas apuntadas en los últimos días son el asistente de dirección David Halls y Hannah Gutierrez-Reed, encargada de todas las armas usadas en la película. Halls, responsable de la seguridad durante la filmación, fue quien le entregó a Baldwin el arma que terminó matando a Hutchins asegurándole que estaba descargada.
En su declaración ante la policía, Halls dijo que cuando Gutiérrez-Reed le mostró el arma antes de la tragedia, solo recordaba haber visto que tenía tres proyectiles. El asistente reconoció el error de no haber verificado la situación y dijo no recordar si la armera hizo girar el tambor de la pistola antes de entregársela. “Estamos haciendo nuestra propia investigación porque hay demasiadas preguntas que todavía no fueron contestadas”, señaló la fiscal. Hasta ahora fueron interrogados Baldwin, Souza, Halls y Gutiérrez-Reed. Todos quedaron en libertad.
Gutiérrez-Reed, en tanto, publicó un comunicado a través de sus abogados este viernes, en el que insiste que no es culpable de la muerte de Hutchins. “La seguridad es la prioridad número uno de Hannah en el set. En última instancia, el equipo nunca se habría visto comprometido si no se hubiera introducido munición real. Hannah no tiene idea de dónde vinieron las balas reales”, afirman los letrados.