El espinoso tema de los refuerzos en la Liga de Voleibol Superior Masculino ataca nuevamente, ahora por la veda existente contra la firma de este tipo de jugador.

Esa realidad, que ha sido recurrente en los últimos años, tiene un efecto secundario: la baja en la calidad del torneo.

¿Por qué? Simple. No hay jugadores que vengan a elevar el nivel de juego y que sirvan como complemento del talento nativo.

Hoy día, deudas con jugadores de temporadas anteriores no le permiten a los equipos fichar jugadores importados por una directriz de la Confederación Norceca.

En el pasado torneo solo dos conjuntos firmaron importados, al tiempo que ningún importado fue firmado en 2010.

La baja es notable si se compara la calidad de la década pasada, cuando a Puerto Rico vinieron grandes nombres internacionales.

El exjugador José Luis ‘Nitro’ Díaz jugó y vio aquella época dorada en la década de 2000. También sigue de cerca el voleibol actual y, a preguntas de Primera Hora, afirmó que aquel tiempo fue uno de mejor nivel.

“No se puede tapar el cielo con la mano”, contestó.

En aquella época vinieron aquí importados de alto calibre como los estadounidenses Clay Stanley y David McKenzie, los cubanos Maikel Cardona y Yosleider Cala, los mexicanos Iván Contreras y José Luis Martell, los brasileño Gilmar Texeira y Paulino Dirceu, los españoles Rafael Pascual y Miguel Falasca, los argentinos Marcos Milinkovic y Jorge Elgueta, los canadienses Jason Haldane y Terry Martin,y el belga Wout Wijsmans, entre otros.

El actual presidente de la Federación Puertorriqueña de Voleibol, César Trabanco -que supervisa el torneo superior- recuerda muy bien aquellos jugadores que complementaban la liga porque fue apoderado de los Leones de Ponce para esa época.

“Eran jugadores que jugaban en las selecciones de sus países”, señaló Trabanco.

Esos refuerzos traían, además de su nivel técnico, un físico de voleibolista internacional que le daba a la Liga extensión en el bloqueo, altura y fuerza en la pegada y potencia en el servicio.

El voleibol actual carece de esos refuerzos que complementen al jugador nativo que busca su espacio en la Liga y que también comienza a exportar su talento con experiencia en el voleibol de la NCAA.

La otra cara de la moneda

Pero este tema, igualmente, presenta otra cara: el hecho de que el jugador nativo tiene más oportunidad de cancha para desarrollar sus habilidades y crecer.

En el tiempo pasado, la queja general era que los refuerzos le quitaban espacio a los nativos. Cada equipo tenía derecho a dos importados. 

Ahora que los nativos tienen su espacio, es el tiempo para que brillen por luz propia, como lo han hecho Ezequiel Cruz, Pablo Guzmán, Sequiel Sánchez, Jean Carlos Ortiz, Ulises Maldonado, Jackson Rivera y Juan Vázquez, entre otros atacantes, en los últimos años.

Ellos, tal vez, hubiesen perdido su espacio en equipos que optaban firmar refuerzos para sus posiciones.

Hay un nuevo grupo de nativos que, coincidiendo con la merma de importados en la liga, ha llegado a exportar su talento, como Steven Morales, Sánchez y Guzmán, quienes salen regularmente de Puerto Rico para jugar en ligas extranjeras.

Hay, en fin, jugadores que están aprovechando la oportunidad, tanto para establecerse en la Liga, como para darse a conocer en el exterior.

“Está el caso de Ezequiel. Metió mano y se dio a conocer. Cada cual tiene que aprovechar la oportunidad que hay ahora. Cada cual se tiene que retar”, dijo Díaz.

Que existan nativos aprovechando la oportunidad en esta época nada tiene que ver con que la época de los 2000 tuvo mejor nivel competitivo. Lo que sí puede que extrañen los actuales jugadores del patio es el roce internacional que hizo crecer entonces a exjugadores como Víctor ‘Vitito’ Rivera.

El fanático también puede ser que extrañe aquel nivel competitivo, y el propio Trabanco desconoce si volverá en algún futuro.

Trabanco dijo que no hay dinero para pagar esos jugadores, al tiempo que recordó que hay deudas que evitan la firma de refuerzos y que no se puede jugar en el verano como antes. “Estamos bien lejos de que eso pase otra vez”, dijo Trabanco.