Han pasado solamente cuatro días, aunque parezca una eternidad, entre el fin de la temporada regular y el inicio de las semifinales de hoy en el Voleibol Superior Femenino.

Tras la controversia que eliminó a Ponce y que pospuso la reanudación de los playoffs, la semifinal B entre las Indias de Mayagüez y las Valencianas de Juncos arranca hoy con historias distintas en  cada equipo.

La historia de las Valencianas tiene que ver con ritmo de juego. El equipo terminó jugando bien la temporada regular y los cuartos de final, los que cerró con un triunfo contra el contendor al título, Caguas. Y tienen que luchar contra el tiempo perdido para arrastrar ese ritmo hacia las semifinales.

“Ya no hay más ‘break’. Estamos en las semifinales. Tenemos que tener ritmo”, dijo la acomodadora de las Valencianas, Vilmarie Mojica.

Mientras se resolvía la controversia de Ponce, las Valencianas entrenaron todos los días, desde el sábado pasado hasta el lunes. Descansaron el martes y ayer reanudaron su preparación para la serie. Han pasado casi cinco días desde su último juego. “Ante la incertidumbre de toda esta situación (controversia con Ponce), tuve que darles libre ayer (martes) para que se despejaran”, dijo el dirigente de Juncos, David Alemán.

Juncos le ganó a Mayagüez dos de tres partidos en la temporada regular.

Mientras, la historia de Mayagüez es una de beneficios personales porque pudo haber salido doble ganador de la controversia de Ponce. 

La primera es que la eliminación de Ponce evitó que Mayagüez se cruzara en las semifinales con el equipo con que nadie se quería cruzar: Caguas. “Creo que se puede tener un mejor pareo con Juncos, aunque eso no quiere decir que será fácil”, dijo el dirigente de las Indias, José Mieles.

El otro beneficio que sacó Mayagüez fue el descanso que pudo darle durante la controversia a sus dos atacantes Saraí Álvarez y Kalei Mau, quienes llevan la carga ofensiva del equipo, cojo de una refuerzo.