La participación de jugadoras refuerzos en la temporada 2020 de la Liga de Voleibol Superior Femenino (LVSF) de Puerto Rico, recibió otro escollo. Esta vez de parte del organismo que rige el deporte a nivel mundial.

La Federación Internacional de Voleibol (FIVB), dejará en manos de la Confederación Norceca, cualquier decisión en torno a la situación de cobro de dinero de jugadoras refuerzos en la LSVF, que tiene atada a la Federación Puertorriqueña de Voleibol (FPV) de contratar refuerzos para la temporada que inicia el 12 de febrero.

En declaraciones enviadas a Primera Hora, Anna Manuelian, directora de Comunicaciones de la FIVB, dijo que es a Norceca que le corresponde atender la situación y que, en caso de que alguna federación nacional o parte involucrada no esté de acuerdo con la determinación, el caso iría ante un tribunal de la FIVB.

“La FIVB fue informada del impasse entre la Federación de Voleibol de Puerto Rico y Norceca. Las disputas financieras entre jugadores y clubes en la región Norceca son un asunto de Norceca en primera instancia. De no estar de acuerdo con la determinación tomada, una de las partes afectadas puede pedir la intervención de un tribunal de la FIVB”, expresó Manuelian en declaraciones escritas.

La FIVB fue informada del impasse entre la Federación de Voleibol de Puerto Rico y Norceca. Las disputas financieras entre jugadores y clubes en la región Norceca son un asunto de Norceca en primera instancia”

-Anna Manuelian / Directora de Comunicaciones de la FIVB

La FPV solicitó a la FIVB su intervención en la controversia, que gira alrededor de las jugadoras refuerzos que la Federación quiere tener acceso para su LSVF 2020 y la negativa de la Confederación Norceca a aprobar refuerzos para este torneo.

La LSVF aprobó la participación de dos refuerzos por equipo y la Norceca no ha aprobado la participación de este tipo de jugadora bajo el alegato que la FPV le adeuda $92,000 por los intereses acumulados de la deuda original que era de $90,000 y que la FPV alega ya pagó. El organismo boricua ha explicado que solo adeudó $13,000 de intereses que la Norceca la impuso a la deuda original, y esos intereses al día de hoy han aumentado a un saldo de más de $92,000.

La Norceca es la encargada de aprobar jugadoras refuerzos desde Canadá hasta El Caribe. La Federación local y la Norceca han tratado de gestionar la deuda y no han tenido éxito.

La deuda original de $90,000 fue heredada por la FPV de la vieja administración de las Pinkin de Corozal del 2013 con dos jugadoras refuerzos dominicanas, Priscilla Rivera y Gina Mambrú. Dicha deuda forzó en su momento la desaparición de las Pinkin hasta un nuevo movimiento que ha revivido al equipo para esta temporada.

Con esta declaración de la FIVB, luce poco probable que jugadoras refuerzos puedan participar en el venidero torneo, ya que una apelación ante un tribural de la FIVB puede tomar meses.