Las Pinkin de Corozal ya están a un paso del vigésimo campeonato en el Voleibol Superior, uno que comenzarán a armar en los próximos meses con la confección del primer equipo que pueda ir detrás de dicha gesta.

Su apoderada Lilly Rojas tiene por la sangre corriendo la fiebre del campeonato y buscará satisfacer la sensación de la victoria con otro campeonato más.

“Obviamente. Vamos por el vigésimo campeonato. Eso es adictivo. Es extraordinario; veinte campeonatos”, dijo Rojas.

Extraordinario es la palabra correcta para describir un vigésimo campeonato por una franquicia porque ninguna franquicia del Voleibol Superior Femenino tiene tantos títulos en sus paredes. De hecho, solo las Pinkin han alcanzado 19 campeonatos en la Liga. Sus más cercanas rivales son las Criollas de Caguas con 13.

“Para mí sería grandioso seguir haciendo historia para el equipo que me vio crecer”, agregó la apoderada que fue una estelar acomodadora de las Pinkin en la década del 1980 y 1990.

Para comenzar la construcción del vigésimo título, las Pinkin no tendrán que sufrir tanto como en el 2022, cuando ganaron el título y tuvieron que rehacer el núcleo de jugadoras porque tuvieron que devolver a sus equipos originales a atletas que le participaron en préstamo ese año, como la acomodadora Raymariely Santos y la central Dulce María Téllez. Ambas eran jugadoras de las Cangrejeras de Santurce, entonces las Sanjuaneras de las Capital, y quienes fueron sorteadas cuando el equipo no fue autorizado a jugar debido a una suspensión de un año que le fue impuesta a la franquicia por un lío que tuvo contra la Federación de Voleibol el año previo.

La experiencia de cara al 2024 no será así, porque las esta vez Pinkin no tienen ese tipo de jugadoras. En su lugar, las Pinkin desarrollaron talento o firmaron a otros para sustituir a esas jugadoras claves. Ese grupo nuevo estará disponible, aunque con cierto límite porque el equipo tiene un máximo de siete espacios para reservar jugadoras.

“Vamos a tener un mejor núcleo”, afirmó Rojas. “Pero va a ser un dolor de cabeza porque es mucho talento y tenemos que reservar solo a siete”, dijo Rojas sobre el roster de 14 jugadoras.

Jugadoras como la MVP y Novata del Año, Paola Rojas, Génesis Miranda, Ivania Ortiz, Adriana Rodríguez son algunas de ese núcleo de jugadoras. Las refuerzos que contraten las Pinkin son otros talentos que redonderán al núcleo.

Una situación que deben velar las Pinkin es que la reserva de una jugadora no es una garantía de participación en el torneo. Por ejemplo, las Pinkin reservaron en 2022 a Daly Santana, quien no jugó en el 2023. Para el 2024, las Pinkin podrían reservar a Santiago, pero esta jugadora podría elegir por jugar en Europa en el 2023-24.

El mismo caso podría ser el del dirigente de las Pinkin, Ángel Pérez. El dos veces corridas Dirigente del Año no esta sujeto a una reserva, pero sí podría elegir el mercado internacional con una oferta que reciba para dirigir en el exterior.

Rojas está consciente de que está en tierra movediza en cuanto a Pérez. Pero en este momento, Rojas dijo que no tiene otro nombre en mente.

“No he hablado con él, pero no tengo a nadie más en mente. Una cosa a la vez”, dijo.