El descanso que ha recibido Brittany Abercrombie en la Copa Panamericana ha servido para que la Selección Nacional rompa con la dependencia que ha creado en la jugadora opuesto.

El dirigente nacional Fernando Morales no oculta lo evidente: sin Abercrombie en cancha, la Selección ha extrañado la ofensiva que la jugadora aporta por el lado derecho de la cancha.

“Brittany es las más veterana del grupo y nos da una seguridad. Cuando hay problemas, vamos con Brittany. Tenemos que aprender a jugar sin ella”, dijo Morales.

Abercrombie no ha jugado desde el tercer set del segundo partido porque tiene una molestia en una rodilla, señaló Morales. El dirigente agregó que la lesión no es seria y que la opuesto podría jugar en los cuartos de final de la Copa Panamericana si la Selección avanza a esa etapa.

Su puesto lo ha ocupado Dariana Hollingsworth, de 23 años y quien está en su segundo torneo con la Selección adulta, además de que dividió su función entre esquina y opuesto en su carrera universitaria. Hollingsworth se ha hecho sentir en el bloqueo y ha metido balones por la posición 4, pero su ofensiva por la posición 1 ha sido poca.

Hollinsworth atacó de 33-9 ante México para un 27 por ciento de efectividad.

Génesis Collazo, quien ha sido la opuesto de la Selección junto a Abercrombie, está inactiva por lesión, aunque está presente con el equipo.

La carga ofensiva de la Selección ha caído sobre sus puntas, Pilar Victoriá, Alondra Vázquez y Paola Santiago. Las medios, Neira Ortiz, Paola Rojas y Alba Hernández han producido ofensiva con su defensa, pero su producción de ataques ha sido poca.

Estadísticamente hablando, la diferencia con Abercrombie en cancha o fuera de ésta se nota en el por ciento de efectividad. Con Abercrombie en cancha, las esquinas de Puerto Rico han atacado sobre 31 por ciento de efectividad. Sin la opuesto en cancha, las esquinas han bajado su efectividad hasta un 27 por ciento.

Morales dijo que hay maneras de romper con la dependencia, comenzando con jugar sin Abercrombie y dándole repeticiones a las que están en cancha.

“Esa dependencia se combate con juego”, dijo.

El dirigente agregó que también el cuerpo técnico tiene que ayudar a la acomodadora Wilmarie Rivera a repartir el balón.

“Y el el cuerpo técnico tiene que ayudar a la acomodadora a buscar los puntos de Brittany en otra jugadora”, agregó.

Morales también dijo que tiene un plan B: mover a Santiago de opuesto. Ese plan B ya lo ha ejecutado en la Copa.