El director de torneo de la Liga Superior de Voleibol Femenino (LVSF), José “Picky” Servera, informó este lunes que todos los integrantes que participen en la programada temporada 2021 deberán estar vacunados contra el COVID-19 para poder competir.

“Es nuestra política institucional”, dijo Servera.

El directivo agregó que esta decisión le será comunicada hoy, lunes, a todos los integrantes del torneo que está pautado a comenzar el 27 de mayo, pero que seguramente será pospuesto para junio.

Servera puntualizó que deberán estar vacunados todos los integrantes de los equipos, desde el personal atlético, técnico, de apoyo y administrativo, así como los contratistas de la Federación Puertorriqueña de Voleibol (FPV), es decir árbitros, oficiales y miembros de la seguridad.

El funcionario entiende que al hacer el anuncio hoy, un mes antes de que comience la competencia, los integrantes tendrán tiempo suficiente para vacunarse con las dos dosis. Reconoció, sin embargo, que podrían ocurrir contratiempos con las citas de vacunación.

En cuanto a la posibilidad de que hayan personas que prefieran no vacunarse, insistió en que la política institucional persigue proteger a sus integrantes dentro de un espacio de trabajo cerrado -como los camerinos y las canchas- y la naturaleza del contacto físico entre las atletas durante el juego.

Servera, abogado de profesión, dijo que las personas que estén en contra de esta determinación tienen la opción de acudir a los tribunales.

“El que no quiera vacunarse tiene un derecho, pero también los otros participantes tienen un derecho a que no los contagien. Si alguien levanta una objeción se resolvería laboral y constitucionalmente. El que no esté de acuerdo tendrá que acudir a donde tenga que ir”, expresó.

En el torneo también participan de forma voluntaria decenas de jóvenes baloneros sin edad legal para vacunarse.

Según el director del torneo, la mayoría de los integrantes de la LVSF se ha vacunado. Expuso que ese dato se lo ofreció el presidente de la FPV, el doctor César Trabanco, basado en un sondeo que ha hecho en la Liga.

Esta determinación de la vacunación compulsoria contrasta con la que han asumido otras organizaciones deportivas, que han dejado la decisión de inocularse o no en manos de los participantes. Un ejemplo de esto son los Juegos Olímpico de Tokio, donde participarán miles de deportistas, que no han impuesto ese requisito para competir. Igualmente, el Comité Olímpico de Puerto Rico (Copur) ha recalcado que no le requerirá eso a sus atletas.

El Voleibol Superior emplea a más 200 empleados de forma directa e indirecta, la mayoría puertorriqueños y mayores de edad.

Servera agregó que también planifica requerir que el público que asista a los juegos esté vacunado. Al momento, el Departamento de Recreación y Deportes solo permite que los menores de edad sean acompañados por una persona en las actividades deportivas.