De las 14 jugadoras en la versión de la Selección Nacional que jugó en el Mundial 2022, seis jugaron voleibol en la NCAA y otras seis se desarrollaron jugando en la LAI.

Utilizando esa estadística, miembros de la LAI defiende a su institución como un producto atractivo para las jugadoras del nivel escolar, muchas de las cuales están eligiendo, en vez de permanecer y hacer estudios en Puerto Rico, el irse a jugar en programas de las diferentes divisiones de la NCAA, como lo ha contabilizado un reportaje en Volleyball Magazine que destaca que sobre 59 jugadoras de Puerto Rico están en programas de la División I sin incluir jugadoras de segunda generación o boricuas residentes en Estados Unidos.

El reclutamiento masivo de jugadoras escolares para la División I de la NCAA tiene un efecto negativo para la LAI, que se nutre de ese tipo de jugadoras, dijo el coach boricua en la NCAA, Manolo Concepción.

La LAI ha notado al menos que son más las jugadoras que cruzan el charco que las que se quedan en la LAI.

“Hay una fiebre por ir a Estados Unidos”, notó el coach de la Universidad Ana G. Méndez, Carlos Núñez.

Ahora bien, dicen los miembros de la LAI que, si bien la decisión de irse al exterior es propia de las jugadoras y sus familiares tomando en consideración estudios, ayudas económicas y nivel competitivo, también es cierto que la LAI es un producto atractivo por todas esas mismas consideraciones.

“Tenemos un torneo competitivo, representativo, con 17 instituciones, con muchos juegos, con el desarrollo que se da a nivel de las instituciones y sus entrenadores”, dijo el comisionado de la LAI, Jorge Sosa.

La LAI tiene un torneo regular de 16 juegos por institución, en formato de ‘todos contra todos’, más tiene en calendario la postemporada con semifinales y finales, que en su última versión fue jugada en coliseos comunes y espaciosos para mejorar su espectáculo.

LA NCAA tiene instituciones en su División I que son excelentes. Tiene programas como el de Florida en donde jugó Aury Cruz, o Nebraska, a donde fue la acomodadora nacional Jennifer Nogueras, y otros como Minnesota, de donde salió Daly Santana. Así por el estilo hay sobre 30 programas de excelencia año tras año.

La LAI reconoce que con esos programas no puede competir.

“Si hay una jugadora con talento y que puede ir a una de esos programas, yo soy el primero que le digo ‘pues vete’”, admite Núñez.

Pero los miembros de la LAI creen que si pueden competir con muchas de las otras más de 400 instituciones que juegan en la División I de la NCAA al darles buenos y disciplinados entrenadores, un torneo competitivo, y becas saludables, entre otros beneficios.

“Hay muy buenas instituciones con muy buenos entrenadores. Entrenadores certificados, que la mayoría solamente trabaja ahora con una rama. Hay entrenadores como Ramón Lawrence, Juan Carlos Núñez, Xiomara Molero y Juan Albarrán y muchos otros que le dan un valor técnico al torneo”, dijo el nuevo director atlético de la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras, Ramón ‘Monchito’ Hernández, quien previamente trabajó en la Pontificia Universidad Católica de Ponce.

“Se ha hecho un esfuerzo de presentar un torneo de voleibol LAI atractivo para los estudiantes y el público en general. Es una buena opción con los cambios que se han hecho”, agregó.

La exacomodadora nacional Vilmarie Mojica es egresada de las Jerezanas de la Universidad de Puerto Rico. La legendaria Eva Cruz fue producto de la Universidad Metropolitana, que hoy día está fusionada con la Universidad del Turabo y la Universidad del Este bajo el nombre de la Universidad Ana G. Méndez.

Las actuales jugadoras nacionales Diana Reyes (Ana G. Méndez), Shara Venegas (Ana G. Méndez), Stephanie Enright (Ana G. Méndez), Alba Hernández (UPR Río Piedras) y Nomaris Vélez (Inter de San Germán) son todas egresadas de la LAI.

Núñez fue más allá y dijo que la LAI tiene entrenadores comprometidos con el desarrollo de las jugadoras, que aunque no trabajan a tiempo completo con las instituciones sí dan la milla extra.

“En mi caso, tuve a una Stephanie Enright que decidió quedarse en Puerto Rico aunque tuvo ofertas. ¿Tú crees que yo le iba a hacerle perder el tiempo aquí? Yo citaba a práctica hasta los domingos porque tenía que ser responsable con esas jugadoras”, dijo.

La LAI también defiende y se vende como institución utilizando un hecho y un beneficio. El hecho establece que, pese a la cantidad de jugadoras yendo a jugar en la División I de la NCAA, su cantidad de equipos no se ha reducido en la rama femenina.

“La participación de los equipos desde el 2019, 2020, incluyendo la pandemia, está estable entre 17 y 18 equipos”, dijo Sosa tomando en consideración que la LAI tiene afiliadas 18 instituciones entre privadas y públicas.

En ese sentido, la UPR de Río Piedras hace eco con la LAI. Su director atlético dijo que en femenino, al igual que en masculino, tienen más jugadoras en el programa de los que tienen cupo (15) en el roster de cada equipo de la LAI.

“En mi caso, que es una institución grande”, dijo Hernández sobre Río Piedras, “cuando hacemos tryouts la casa se llena. Tal vez en programas más pequeños hay menos jugadoras (disponibles), pero nosotros todavía podemos recibir jugadoras de nivel competitivo”.

Mientras, el beneficio que también utiliza la LAI para atraer jugadoras es la libertad para que la gran mayoría de sus instituciones afiliadas le permiten a sus jugadoras-atletas jugar por dinero en el Voleibol Superior de Puerto Rico al tiempo en que también pueden recibir un beneficio económico, que es aparte de la beca estudiantil.

El beneficio económico lo establece la institución, pero el máximo por reglamento de la LAI que puede recibir un atleta-estadiante es $8,500 por 10 meses, ésto luego de cubrir gastos de matrículas y cuotas, lee el reglamento de la LAI.

Un ejemplo fresco de una voleibolista con taller en la LAI y Superior lo es el de la esquina de la Ana G. Méndez, Ivania Ortiz, quien también fue campeona este año con las Pinkin de Corozal en el Voleibol Superior. Ortiz fue Novata del Año de Superior en el 2021 con las Criollas de Caguas.

“Con nosotros pueden jugar Voleibol Superior en muchas instituciones. Y a diferencia de la NCAA, la LAI por reglamento les permitimos a los jugadores profesionales, en este caso Superior, un tope para gastos deportivos”, dijo Sosa.

Únicamente, los recintos de Mayagüez, Río Piedras y Bayamón de la UPR privan a sus atletas de jugar en el Voleibol Superior porque están afiliados a la NCAA, que no permite que sus atletas-estudiantes reciban dinero. Las demás 14 instituciones que tienen voleibol LAI le permite a las jugadoras firmar con Superior.