Corozal. El juego del miércoles fue una primera prueba de que este puede ser un año largo para las Pinkin.

En su primer juego desde el 2013, Corozal cayó en tres sets ante las Indias de Mayagüez, mostrando unas deficiencias que les tomarán tiempo y esfuerzo en arreglarlas.

El equipo que está rehaciendo la franquicia desde cero sabía que tendría deficiencias. Reflejadas éstas, el equipo quiso hacer un recordatorio a su público conocedor.

“Corozal tiene que ser paciencia con las Pinkin”, dijo el debutante dirigente Ángel Pérez. “Obviamente, vamos a salir a jugar mejor, con los juegos que pasen y las repeticiones que tengamos”.

“Pero este es, definitivamente, un pueblo que conoce de voleibol, que se desespera si no tiene un equipo contendor. La paciencia del fanático siempre es complicada. Pero nosotros como cuerpo técnico y Lily Rojas como apoderada, vamos a tener paciencia y armar poco a poco el futuro de la franquicia”, agregó Pérez.

Aproximadamente 700 fanáticos asistieron al partido en el que el cuadro regular de las Pinkin no terminó en cancha. De las siete titulares, incluyendo la líbero, solo tres terminaron el juego, dos de ellas sus refuerzos Becky Perry y Lindsey Ruddins.

De las 15 jugadoras de Corozal, solo Gelymar Rodríguez ha jugando antes de titular en el Voleibol Superior.

Pérez dijo que en el juego que tuvo puntuaciones de 25-19, 25-14 y 25-15, probó a casi todas las jugadoras para ver cuánto podían dar en un juego real y conocer, en base a la información que ve en juego y entrenamientos, cuál es el cuadro que más compite.

“Esto será armar un rompecabezas todas las noches con las mejores que estén entrenando y el mejor pareo que podamos tener”, dijo Pérez.

El segundo juego de las Pinkin será el viernes desde las 8:00 p.m. recibiendo a las Changas de Naranjito.