Special Olympics Puerto Rico tiene una nueva casa.

La organización firmó un acuerdo colaborativo son la Fundación Puertorriqueña de Síndrome Down que beneficiará a ambas entidades y, a su vez, a sus respectivas matrículas. Los atletas que representan a Puerto Rico en Olimpiadas Especiales contarán con espacios para entrenar las disciplinas deportivas y, a cambio, se comprometen a realizar unas mejoras a la cancha de baloncesto ubicadas en las inmediaciones de la Fundación Puertorriqueña de Síndrome de Down localizada en San Juan.

“Le damos la bienvenida a su casa”, dijo Francisco Correa, director ejecutivo de la Fundación Puertorriqueña. “Es la culminación de un camino que se estaba labrando desde hace tiempo. Era lógico compartir nuestro espacio con Special Olympics”.

El acuerdo estipula que la Fundación se compromete a proveer dos salones para las oficinas administrativas de Special Olympics. Además de el uso de los espacios deportivos, las entidades colaborarán en la promoción de los programas de Special Olympics entre los alumnos. Actualmente, la Fundación le ofrecer servicios a 200 familias.

“Es motivo de mucha alegría la firma de este acuerdo que estará vigente hasta el 2040. Los 21 años son significativos porque fue el número que utilizó Roberto Clemente en la espalda y para los puertorriqueños es simbólico. Este esfuerzo lo llevamos trabajando desde antes del huracán María (2017), pero se tuvo que detener. Cuando vinimos después del huracán no se podía ni entrar a la Fundación, pero poco a poco se fueron poniendo las cosas en orden. Finalmente es una realidad”, dijo José Barea, presidente de la Junta de Directores de Special Olympics.

Para José Marxuach, presidente de la Fundación Puertorriqueña de Síndrome Down, la unión era lógica.

“Vivé con mi hija que no tenía un lugar donde practicar. Nosotros contamos con una cancha donde ahora los atletas de Special Olympics podrán practicar y entrenar. A nosotros nos hacían falta los programas deportivos y queremos que se sientan como en su casa”, sostuvo Marxuach.