Tennessee no podrá volver a sus instalaciones de entrenamientos el miércoles, luego que otros dos jugadores dieron positivo, en medio del primer brote de COVID-19 en la NFL, y los Patriots de Nueva Inglaterra cancelaron una práctica al trascender informes de prensa de un tercer jugador contagiado.

Sports Illustrated informó que Stephon Gilmore, el mejor jugador defensivo de la liga la pasada temporada, dio positivo el miércoles, siendo colocado en la lista de bajas por COVID-19. Los Patriots no explicaron el motivo de la cancelación y declinaron responder a consultas si se debía a un tercer caso.

El quarterback titular de los Patriots Cam Newton arrojó positivo el sábado y fue colocado en la lista de bajas por COVID-19, y añadieron el martes a un jugador defensivo de su equipo de prácticas. Los Patriots deben recibir a Denver el domingo.

Tennessee no reportó positivos el lunes o martes por primera vez tras seis días consecutivos de resultados positivos. Se precisaba de un tercer día consecutivo para permitir la vuelta del equipo a sus instalaciones.

En cambio, el brote de los Titans ascendió a 22 casos, con 20 desde el 29 de septiembre, según la persona que habló con AP bajo la condición de no ser identificada debido a que tanto la NFL como los Titans no han anunciado lo más recientes resultados.

Los más recientes positivos ponen en duda el partido que Tennessee tiene previsto para el domingo contra Buffalo (4-0), un duelo entre dos de los seis equipos que se mantienen invictos. La NFL reprogramó el partido de los Titans contra Pittsburgh, del 4 de octubre al 25 de octubre.

La NFL le dio a Nueva Inglaterra y Kansas City un día extra tras el positivo de Newton el sábado, y los Chiefs vencieron 26-10 a los Patriots el lunes.

Pero retrasar por un día el partido de los Bills contra los Titans es complicado, dado que Buffalo debe recibir a Kansas City el jueves 15 de octubre.

Tennessee no ha podido reunir al equipo desde el 27 de septiembre, cuando los Titans vencieron 31-30 a los Vikings en Minnesota. Los Titans disputaron ese partido tras descartar al coach de linebackers Shane Bowen en Nashville tras dar positivo el 26 de septiembre, y la NFL cerró las instalaciones el 29 de septiembre.