Stephanie Piñeiro, Ashleyann Lozada y la debutante Krystal Rosado Ortiz son parte del equipo de boxeo femenino que representará a Puerto Rico durante los XXIV Juegos Centroamericanos y del Caribe San Salvador 2023, que inaugurarán el 23 de junio y que se realizarán en esa capital de El Salvador y en la subsede de Santo Domingo.

Piñeiro y Lozada son medallistas de la pasada edición en Barranquilla 2018. La primera ganó bronce en los 64 kilogramos, mientras Lozada obtuvo oro en los 57 kilogramos. Ambas desean subir a lo más alto del podio para conseguir los pases a los Juegos Panamericanos en Santiago 2023 y, luego, a los Juegos Olímpicos París 2024.

Por su parte, Rosado Ortiz espera unirse a sus compañeras todo el trayecto hasta Francia.

“Estoy un poquito ansiosa y emocionada de poder estar representando nuevamente a Puerto Rico en unos Centroamericanos. En los pasados me fui con un poco de sabor amargo porque me llevé una medalla de bronce y esperaba oro”, declaró Piñeiro, que en esta edición peleará en la división de los 66 kilogramos.

“Para este Centroamericano voy más preparada. Conozco más a mis rivales, soy más experimentada. Así que espero traer esa medalla a casa. Este año es sí o sí”, reiteró la atleta de 32 años.

Piñeiro indicó que su objetivo es competir en unas Olimpiadas y ser la primera boxeadora boricua en conseguir esa clasificación porque ya conoce a sus rivales de la zona panamericana. Agregó que si clasifica junto a sus compañeras sería fenomenal.

“Si somos las tres muchísimo mejor para que el boxeo femenino siga creciendo. Sería brutal porque no es fácil estar en un evento así de grande sola. Obviamente, van más atletas, pero uno quiere estar con sus compañeras. Lograr ese sueño con tus compañeras sería brutal”, declaró Piñeiro, quien debutó en el boxeo rentado en septiembre de 2019 y espera poder convertirse en campeona mundial.

Lozada -que va con la meta de defender medalla dorada en los 57 kilogramos- dijo estar “superemocionada” con sus segundos juegos. Añadió que la preparación para la justa actual ha sido distinta por el grado de madurez que ha alcanzado.

“Son mis segundos Centroamericanos, pero la preparación es diferente. Estoy más concentrada porque la gente va evolucionando y para estos Centroamericanos vengo más ready que nunca. Mi meta es la medalla de oro porque de ahí clasifico a los Panamericanos”, apuntó Lozada.

La peleadora de 31 años aún no ha dado el paso de entrar al profesionalismo porque desea enfocarse completamente en cumplir su ahnelo olímpico.

“Cuando termine esta etapa, que es mi sueño, voy a mi etapa profesional, que también es mi sueño”, dijo Lozada.

Rosado Ortiz -que comenzó en el boxeo un día en que sus hermanos mayores se la llevaron al gimnasio en lo que su mamá llegaba de trabajar- se mostró orgullosa de lo que ha logrado.

“Me siento contenta, entusiasmada y orgullosa porque hemos luchado tanto para esto, y se me dio la oportunidad. Esperamos venir con la victoria porque estamos preparadas para esto”, expresó la atleta de 20 años y que combatirá en los 50 kilogramos.

Rosado Ortiz tiene un hijo de poco más de un año llamado Xavier, que es una de sus inspiraciones. El día de la entrevista, estuvo acompañada del simpático pequeño.

“Mi vida cambió, pero para bien. Es lo mejor de mi vida, no me arrepiento”, puntualizó Rosado, estudiante de administración de empresas en la Universidad Ana G. Méndez.