Summer Liz Márquez y su madre Liz López tuvieron la mejor vitrina para llevar su mensaje de seguridad en las vías.

La vitrina: ir corriendo solas en una dirección del puente Teodoro Moscoso mientras en la otra dirección de la vía iban miles de joggers que notaron su presencia y aplaudieron y animaron su esfuerzo.

“Yo estaba llorando cuando vi a todos esos corredores que iban en dirección contraria a nosotros y nos animaban”, dijo López mientras hacía el gesto de secarse las lágrimas con la palma de las manos.

A eso vinieron hija y madre, a competir y a que les vieran miles de persona para concientizar sobre los peligros que existen en las carreteras del País.

“Cumplimos las dos metas”, dijo López, residente en Florida. “Gracias a Dios, estuvimos en Puerto Rico”.

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Summer Liz sufrió un accidente de tránsito que le provocó severos daños al cerebro y le privó de la movilidad física que tenía cuando sufrió el aparatoso accidente en el 2016, en la PR22.

Hoy día tiene 24 años y está llevando el mensaje de la necesidad de seguridad en las vías de tránsito en los eventos deportivos. Hace un año, madre e hija compitieron en un tríalo en la Florida.

Summer Liz se mueve en los eventos sobre su silla de rueda. Su comprometida madre la impulsa corriendo. Así, ambas hace un equipo de joggers. Cuando hacen tríalos, Liz nada e impulsa a Summer sobre el agua en un gesto sorprendente de fuerza, determinación y compromiso.

Este domingo completaron la ruta en 50:51 minutos y finalizaron en el puesto 96 entre 5,480 participantes.

Luego de la meta, Summer Liz y Liz López tuvieron otra vitrina: las felicitaciones de cientos de participantes que arribaron luego de ellas a la meta y que seguro se llevaron el mensaje de seguridad en las carreteras.

“El ánimo que nos dio la gente fue tan y tan lindo, que fue demasiado. Estoy agradecida de Puerto Rico porque pudimos llevar el mensaje nuevamente”.