Puerto Rico le apuesta al surfing en San Salvador con ocho atletas
Este deporte estará activo por primera vez en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, y los boricuas participarán en tres modalidades.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 1 año.
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A nivel de Juegos Centroamericanos y del Caribe, el surfing hará su estreno en San Salvador, y recién inicia su segundo ciclo dentro del movimiento olímpico, que prueba el potencial y atractivo para su mercado.
La Federación de Surfing de Puerto Rico y el Comité Olímpico de Puerto Rico (Copur) siguen insertados en esta oportunidad de crecimiento y enviarán a San Salvador a ocho surfers en tres modalidades.
Estos atletas han quedado a gusto con la estructura que les ha ofrecido el movimiento olímpico.
“Pasó de ser un hobbie o un estilo de vida -que lo sigue siendo- pero ha cambiado la mentalidad de que los surfers eran un queda’os, que lo que hacían era janguear... Se siente más profesionalismo ahora”, dijo Iana Ramírez, atleta de tabla larga.
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El surfing debutó en los Juegos Panamericanos de Lima 2019 y luego llegó al escenario olímpico en los Juegos de Tokio 2020.
En Puerto Rico, el surfing ha estado presente hace décadas y ha recorrido el mundo, tanto como estilo de vida como deporte, con los contest que han existido en la isla y que hicieron en Rincón y pueblos adyacentes un destino de olas como lo que es ahora El Salvador, Panamá, Perú, entre otros lugares de Latinoamérica que están explotando -en el buen sentido de la palabra- sus costas para este deporte.
Surfers boricuas han estado en el máximo nivel de competencia mundial y han servido de base para los surfers que hoy día la Federación de Surfing de Puerto Rico y el Copur llevan a San Salvador 2023, como es el caso del exsurfer Carlos Cabrero y su hija Havanna Cabrero, que será una de las representantes de Puerto Rico en los Juegos.
Ramírez especificó que el gran cambio del surfing dentro del movimiento olímpico ha sido el apoyo y la estructura que está a su alrededor. Parte de ese apoyo es un coach que le ayuda con las técnicas y reglas, un profesional en psicología que le sugiere técnicas de concentración para los momentos de tensión que vienen con la competencia.
“Antes cogía mi tabla y me metía en el agua y hacía lo mejor que podía, pero habían muchas reglas que no estaba 100% segura de cómo utilizarlas. Ahora ha existido un cambio más progresivo. Antes se sentía como que nos tiraban a los tiburones, pero ahora se siente como que más en serio”, dijo la hija de uno de los principales creadores de tablas de Puerto Rico, Néstor Ramírez.
Además de Ramírez, el equipo de Puerto Rico para San Salvador 2023 se compone del veterano Rubén ‘Babby’ Quiñones (bodyboard), Anaís Mendoza (bodyboard), Mia Calderón (tabla corta), Dwight Pastrana (tabla corta), Ricardo Delgado (tabla corta) y Río Donaldson (tabla larga). El entrenador es Magnum Martínez.
Parte de esa delegación está compitiendo esta semana en San Salvador, en el primero de los clasificatorios para las Olimpiadas de París 2024.
El presidente de la Federación de Surfing de Puerto Rico, Oscar Martínez Borrás, afirmó que la entrada del surfing boricua al movimiento olímpico ha “profesionalizado” el deporte en la isla, que tuvo una buena estructura en los ‘90 con la presidencia federativa de John Ashton.
El ‘profesionalismo’ ya ha producido una medalla dentro del movimiento olímpico, siendo esta en el pasado ciclo con la medalla de bronce que consiguió Marie Carmen Rivera en la modalidad SUB en los Juegos Panamericanos Lima 2019. SUB no es una prueba en San Salvador 2023. También produjo seis medallas en los pasados I Juegos de Centroamericanos y del Caribe de Mar y Playa Santa Marta 2022, que es una competencia organizada por los comités olímpicos regionales.
Los logros -como los de Rivera- han sido posible gracias a que este deporte ha encontrado dentro del olimpismo los recursos para ayudar a sus atletas, como equipo, profesionales técnicos y costeo de transporte aéreo para sus competencias.
“Tenemos el acceso a los fondos para dirigirlos a los atletas”, dijo Martínez Borrás.
El surfing no llegó solo al movimiento olímpico. En ese sentido, el Copur también necesita el surfing y lo buscó.
El movimiento olímpico necesita el surfing para alcanzar los auspiciadores propios de este deporte, que no son Nike ni Adidas, y sí son otras marcas mundiales. Además, el movimiento utiliza la plataforma olímpica para atraer nuevos fanáticos al mundo de los cinco anillos; esos jóvenes que siguen deportes extremos como el surfing.
La presidenta del Copur, Sara Rosario, quien también tiene puestos de liderazgo en el movimiento olímpico de América, confirmó que su organismo ayuda al surfing, y viceversa.
“Es una ayuda mutua. Ellos se mantienen consistentes en el olimpismo, los afiliamos y tienen derecho a los beneficios. Tienen un presupuesto que hemos ido aumentando. Tenemos atletas de muy buen nivel, que producen medallas y vendemos el país con su exposición. Además tenemos competencias mundiales, como el Mundial SUB que se hizo en San Juan en el 2022 y el Mundial de Arecibo en el 2024 que será el último clasificatorio a los Juegos Olímpicos de Paris”, dijo Rosario.