Por causa del COVID-19 crece la fiebre por el ciclismo en China
El país en el que en algún momento existían más bicicletas que autos, esto por ser modos de transportación, tiene ahora un boom hacia la fase deportiva.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 2 años.
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El boom de ciclismo deportivo en China durante la pandemia
Beijing. Lindsay Mo no pudo ir más al gimnasio cuando la municipalidad de Beijing cerró todas las instalaciones deportivas en medio de un nuevo brote del coronavirus. Empezó a practicar el ciclismo y se apasionó por el deporte.
“Me di cuenta de que correr en bicicleta es algo muy distinto a pedalear normalmente”, comentó. “Vas rápido, es emocionante. Cuando empecé a correr, ya no pude dejar la bici”.
La bicicleta no es ninguna novedad en China. Es desde hace tiempo un medio de transporte masivo, al punto de que alguna vez hubo más bicis que autos en las calles. Pero el ciclismo es visto cada vez más como un deporte de la clase media urbana.
Lo que comenzó como un deporte para pocos hace una década registró un pequeño boom. Las carreras organizadas por el club Qiyi de Beijing atrajeron 10,000 participantes el año pasado. A nivel nacional, al menos 20 millones de personas hacen ciclismo deportivo, según la Asociación China de Ciclismo.
Esto se debe en parte a la pandemia del COVID-19. Las autoridades cierran toda instalación que no sea esencial, incluidos los gimnasios, cada vez que hay un brote del virus, pero el ciclismo, un deporte que se puede practicar en forma individual o en grupo, casi siempre al aire libre, no ha sido afectado mayormente.
Los recorridos organizados por clubes de ciclismo llevan a la gente a las montañas de las afueras de Beijing o visitan los sitios más llamativos de la ciudad, incluida la Plaza Tiananmen.
Yang Lan dice que el deporte permite a la gente olvidarse de las preocupaciones cotidianas en la era del coronavirus.
“Con la pandemia, pareciera que es la única forma de escaparle a los problemas y al ritmo de la ciudad”, dijo Yang.
Una mañana reciente, Yang y otros 14 ciclistas pedalearon por el Cañón del Río Baihe, en un sector rural al norte de Beijing, a pesar del calor y la humedad.
Luciendo equipo apropiado, recorrieron caminos llanos e inclinados, sudando a lo largo de más de 70 kilómetros (45 millas) y disfrutando de vistas espectaculares.
Pedalear por sus propios medios le genera a Yang un enorme placer, que no ofrecen ni las motocicletas ni los autos.
“Te sientes integrado con la naturaleza. Me parece mucho más interesante”, expresó Yang, quien comenzó a pedalear en febrero, en pleno invierno, cuando buscaba algo nuevo que hacer.
El boom del ciclismo refleja la creciente popularidad de las actividades al aire libre, según Feng Baozhong, vicepresidente de la Asociación China de Ciclismo.
“Sobre todo tras la pandemia, la gente quiere salir de las casas y hacer deportes al aire libre”, manifestó.
La popularidad del deporte aumentó las ventas de bicicletas.
La fabricante estadounidense Specialized dice que las ventas en sus tiendas de Beijing aumentaron entre un 20% y un 30% entre marzo y junio, comparado con el mismo período del año pasado. Y hubieran vendido el doble de esa cantidad de no haber escaseado los productos para bicicletas, de acuerdo con He Dong, representante de la firma en Beijing.
El mercado de bicicletas y productos asociados generó entre 12,000 y 15,000 millones de dólares en el 2021, según Zhou Fuyuan, fundador de Magic Cycling, una plataforma informativa online. Se pronostican ventas del orden de los 16,500 millones de dólares para el 2026, de acuerdo con información publicada por Research and Markets, firma que analiza el mercado.
La creciente demanda y los problemas de suministros implican que quienes quieran comprar bicicletas, sobre todo principiantes o ciclistas de mediano nivel, deben esperar semanas, si no meses, para recibir su bici. He dijo que por cada cliente que recibe una bici, hay al menos diez que esperan la suya.
Algunos optan por pagar lo que sea para llevarse lo que hay disponible. Joanna Lei pagó el equivalente a 8.900 dólares por su primera bicicleta de carrera. Dijo que era mejor invertir en eso que en una cartera de lujo.
“Inviertes en tu cuerpo, en una buena forma de hacer ejercicio”, comentó. “Es algo más valioso que la ropa y las carteras”.
Feng espera que la popularidad del ciclismo perdure una vez superada la pandemia.
“No van a dejar de promover una buena salud”, sostuvo.
La popularidad del deporte, por otro lado, podría ser un indicio de la concientización de la gente en torno a la necesidad de proteger el medio ambiente y de reducir las emisiones de carbono.
“Es un estilo de vida más saludable y beneficioso para la sociedad”, expresó Yang. “La gente está más consciente de la necesidad de proteger el medio ambiente en beneficio de la sociedad”.