Tokio. La polista de ascendencia boricua Maggie Steffens fue parte de un histórico logro en estos Juegos Olímpicos en representación de Estados Unidos y dijo que está ansiosa por regresar a Puerto Rico a compartir su logro junto al pueblo de Culebra, que fue sede de su entrenamiento hacia Tokio 2020.

La hija del puertorriqueño Carlos Steffens es la capitana de la selección de polo acuático de Estados Unidos que se convirtió el sábado en campeón olímpicos por tres olimpiadas consecutivas. Es el primer equipo de conjunto más allá del de baloncesto masculino en ganar tres títulos olímpicos corridos.

De paso, Steffens se convirtió en la máxima anotadora del polo acuático olímpico durante el torneo que concluyó con la victoria 15-4 en la final ante España. Consiguió el récord con su gol olímpico 49 el 30 de junio ante Rusia.

Relacionadas

“Estamos disfrutando el momento. Este equipo, este trayecto, ha sido mágico”, dijo la polista.

La familia Steffens, que incluye a la también polista y campeona olímpica (Londres 2012) Jessica, ha estado relacionada al polo acuático boricua desde Borinquen, de donde salió Carlos Steffens luego de representar a Puerto Rico en tres Juegos Panamericanos para convertirse en uno de los mejores polistas universitarios e internacionales.

Inclusive, Maggie dijo que la medalla de oro en Tokio 2020 se formó, en parte, en Culebra.

La atleta detalló que su participación en esta tercera medalla olímpica tuvo una base de entrenamientos en la playa Las Pelás, en donde trabajó su nado. La natación es la base en este juego.

Detalló que usó Las Pelas para nadar fuera de la piscina durante la pandemia y agregó que quiere regresar a la isla municipio para celebrar su logro.

Jugadoras del equipo celebran con sus medallas.
Jugadoras del equipo celebran con sus medallas. (Mark Humphrey)

“Quiero también compartir este oro con Culebra, que es nuestra casa. Usé Culebra, inclusive, como un lugar de entrenamiento durante la trayectoria a Tokio 2020. No estuvo nada mal nadar con las tortugas mientras entrenaba para estas Olimpiadas”, dijo.

Tanto Jessica como Maggie han seguido los pasos de su padre sin olvidar sus raíces porque inclusive han viajado a la Isla para dar talleres y clínicas de polo.

Algo en lo que siempre reflexiono y que heredé de mi padre, es jugar con ritmo y disfrutar el momento. Trato de jugar con el carácter de Puerto Rico

-Maggie Steffens

“Algo en lo que siempre reflexiono y que heredé de mi padre, es jugar con ritmo y disfrutar el momento. Trato de jugar con el carácter de Puerto Rico”, dijo.

Aunque Jessica ya no está activa, Maggie mantiene la representación de la familia en el polo, que tiene muchas amistades en Puerto Rico que estuvieron pendiente al desempeño de la boricua con Estados Unidos.

Esta es otra foto de todo el equipo y su grupo de trabajo.
Esta es otra foto de todo el equipo y su grupo de trabajo. (Mark Humphrey)

“Espero que Puerto Rico sepa y sienta que este oro es suyo. Puerto Rico es mi casa. Ser puertorriqueña compone mucho de lo que soy. Sentí la energía, la resiliencia y la fuerza de la gente. No puedo esperar a colocarles la medalla por el cuello porque han sido parte de este viaje”.